Moscú justifica la actuación de Reagan en el 'caso Achille Lauro'

La Unión Soviética ha manifestado su solidaridad con Estados Unidos en la crisis del Achille Lauro al emitir un comentario por la agencia Tass en el que califica de "justo y comprensible" el desvío por cazas norteamericanos del avión de Egypt Air donde viajaban los secuestradores del trasatlántico italiano. Washington pidió ayer a las autoridades italianas que detuvieran a Abul Abbas, líder del grupo que realizó el acto de piratería, pero este dirigente palestino fue puesto por la tarde en un avión rumbo a Belgrado por el Gobierno de Craxi, lo que provocó una enérgica protesta del embajador norteamericano, Maxwell Rabb.

"Los crímenes terroristas, sea cual sea el lugar en que son cometidos, deben ser castigados lo más severamente posible", indicaba ayer un despacho de la agencia soviética Tass, según el cual, "la cólera y la indignación de los norteamericanos ante este crimen de los piratas del Achille Lauro es justa y comprensible". Washington está dispuesto a tomar la iniciativa, a partir de ahora, en la lucha antiterrorista. El presidente Ronald Reagan ha advertido a los terroristas: "Podréis correr, pero no podréis esconderos", dijo.Ayer, el Departamento de Justicia norteamericano pidió a las autoridades italianas que detuvieran a Abul Abbas, al que considera inspirador del secuestro del Achille Lauro, mientras se preparaba la petición de extradición. Sin embargo, esta petición no podrá ser satisfecha, pues las autoridades italianas embarcaron a Abul Abbas en un avión que partió de Roma hacia Belgrado a última hora de la tarde.

Abul Abbas viajaba, junto con los secuestradores del barco, en el Boeing 737 de Egypt Air que fue obligado a aterrizar en la madrugada del jueves por cazas norteamericanos en una base militar de la OTAN en Sicilia. Tras largas negociaciones entre el ministro de Asuntos Exteriores italiano, Giulio Andreotti, y el embajador egipcio en Roma, Iahia Rifat, a cuyo cargo se encontraba Abbas en Roma, el dirigente palestino y otro miembro de su grupo salieron hacia Belgrado.

En Italia, en la cárcel de máxima seguridad de Siracusa, quedan los cuatro secuestradores del trasatlántico, que niegan haber asesinado al pasajero norteamericano Leon Klinghoffer. El Buró Federal de Investigación estadounidense (FBI) ha enviado a Italia dos equipos especiales de elite para "seguir y ayudar en lo posible" en este caso. "Vamos a trabajar estrechamente con los italianos para asegurarnos de que tienen todas las pruebas ( ... ) y para tener acceso a la información que posean ellos", dijo ayer el jefe del FBI, William Webster.

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