Más de un centenar de veteranos dirigentes chinos presentan su dimisión para dejar paso a los jóvenes

Más de 100 dirigentes del Partido Comunista chino (PCCh), entre los que se encontraban 10 veteranos de la revolución, presentaron ayer su dimisión oficialmente, para permitir que elementos más jóvenes tomen las riendas del país. Esta dimisión masiva es considerada como una victoria en toda la línea de Deng Xiaoping, el hombre fuerte de Pekín. El PCCh inicia mañana una conferencia especial en la que, mediante el nombramiento de sustitutos de los dimisionarios, procederá a rejuvenecer las filas dirigentes del partido.

La agencia Nueva China anunció ayer que 10 de los 24 miembros del Politburó, 65 de los 210 integrantes del Comité Central y 67 representantes en dos comisiones del PCCh presentaron su dimisón ante la sesión plenaria del Comité Central del partido, con el motivo oficial de dejar paso a los jóvenes.Entre quienes dejan sus funciones se encuentran. algunos de los grandes nombres de la historia de la revolución comunista culminada en 1949. Así, el mariscal Ye Jianying, de 88 años, que pasaba por ser el aglutinador de todos los enemigos de las reformas económicas modernizadoras impuestas por Deng Xiaoping, y Deng Yingchao, de 81, viuda del que fuera primer ministro Chu Enlai. Ocho de estos dimisionarios del Politburó son militares, y su desaparición de la escena política marca, a juicio de los analistas, el fin de una era en la que el Ejército gozaba de una influencia decisiva en Pekín.

Llama la atención de los observadores el hecho de que conserve su escaño en el Comité Central el antiguo dirigente chino Hua Guofeng, de 64 años, escogido como sucesor por Mao Zedong y a quien Deng Xiaoping, de 81 años, apartara del poder hace cuatro años. "Deng parece haber conseguido todo lo que quería", comenta un diplomático occidental, "pero no quiere aparecer como un vengativo".

Victoria de Deng

En medios diplomáticos se considera que esta remoción es una significativa victoria de Deng Xiaoping, el hombre fuerte de China y arquitecto de las reformas que han afectado al sistema de vida chino, principios a los que el mariscal Ye y demás dimisionarios se han opuesto decididamente.

Los cuatro hombres que forman la cúpula política china -Deng Xiaoping, Li Xiannian (presidente de la República), Hu Yaobang (secretario general del PCCh) y Zhao Ziyang (primer ministro)- seguirán por ahora en sus puestos, aunque el relevo de Li, de 76 años, se da casi por hecho debido a motivos de salud, según una fuente oficial. Este relevo presumiblemente se anunciará en la conferencia especial del PCCh que empieza mañana. Li sería reemplazado por Zhao, a quien, a su vez, sustituiría el viceministro Li Peng, de 56 años.

La sustitución de los dimisionarios se llevará a cabo en el curso de la conferencia especial, la tercera de la historia del PCCh. En ella serán elevados a cargos con alta responsabilidad política un gran número de tecnócrtas, que tendrán por misión mantener y afianzar al país en el actual programa de reformas económicas. Éstas son, básicamente, una política de apertura al exterior, con aceptación de inversiones extranjeras; el uso de medidas capitalistas y de libre mercado para reactivar la economía, y la aceptación de la libre empresa y del incentivo económico frente al monopolio estatal. Algunos, observadores creen ver en este relevo generacional y mental en los órganos directivos del la PCCh una poderosa y silenciosa m revolución de Deng, quien pretende que la reforma y modernización in de China dure mucho más allá de su control sobre el partido.

Séptimo plan quinquenal

El pleno del Comité Central, precedido por cuatro días de trabajos preliminares, abordó en su sesión de ayer, además del "reajuste parcial de la composición de los órganos centrales dirigentes", como informaba Nueva China, "una propuesta para el séptimo plan quinnquenal (1986-1990) relativa al desarrollo económico y social del país". Los cambios no afectan sólo a los altos órganos del PCCh. En los últimos tres años, más de un millón de funcionarios dependientes de Gobierno central y de los locales han sido destituidos. En 29 provincias o regiones autónomas se ha relevado a los principales responsables de la Administración china.