Dos reclusos de Nanclares de la Oca declaran sobre el asesinato de otro preso

El titular del Juzgado número 3 de Vitoria tomó declaración ayer a dos reclusos de la prisión de Nanciares (Álava), identificados como presuntos autores del asesinato del interno José Ramón López, acuchillado en su celda el domingo por la tarde. El juez no reveló los nombres de los dos presuntos autores de lo que parece ser un ajuste de cuentas relacionado con problemas de liderazgo en el interior de la cárcel.

Hacia las 17.40 del domingo, cinco reclusos armados con objetos punzantes -al parecer cucharas y tenedores afilados- lograron reducir a un funcionario que presta su servicio en el módulo de primer grado, destinado a presos comunes considerados altamente peligrosos. Tras arrebatar las llaves al funcionario, dos de los agresores se dirigieron a la celda de José Ramón López, acuchillándole.En contra de la versión que circuló inicialmente, que relacionaba el asesinato con un amotínamient,o de los reclusos del módulo en cuestión, fuentes del dentro penitenciario informaron que los agresores liberaron al funcionario nada más cometer el asesinato, sin que se produjeran nuevos incidentes. No obstante, según informó el Gobierno Civil de Álava a última hora de la tarde, 29 reclusos del módulo de primer grado se encontraban en situación de aislamiento.

Las unidades antidisturbios de la Guardia Civil, cuya presencia fue solicitada por la dirección de la cárcel en los primeros momentos de confusión, tomaron posiciones en torno al recinto penitenciario, pero no llegaron a intervenir.

José Ramón López Moscoso, de 42 años, natural de La Coruña, ciudad en la que residía habitualmente hasta su detención, estaba acusado de un delito de tenencia ilícita de armas y era considerado un delincuente peligroso, según fuentes del Gobierno Civil de Álava. Su cadáver, tras la autopsia realizada ayer, fue trasladado a La Coruña.

Por otra parte, a última hora de la tarde de ayer siete reclusos del mismo centro fueron ingresados en el hospital provincial de Vítoria tras autolesionarse causándose heridas en el vientre y en los brazos. Poco después, dos de ellos fueron devueltos a la prisión y cinco quedaron hospitalizados.