La policía italiana considera que el caso está resuelto
Guglielmo Incalza, el segundo jefe de la Escuadra Móvil de la policía romana, ha sido, junto a Nicola Cavaliere, jefe del Grupo de Homicidios de la Escuadra, el cerebro de la operación que ha permitido la detención de las 11 personas relacionadas con el rififí de Barcelona. Casado, dos hijos, 41 años, siciliano, pulcro y elegantemente vestido, Incalza está considerado en medios policiales como un experto en la investigación de la Mafia y la delincuencia común. Incalza declaró ayer a EL PAIS que "aún habrá más detenciones, pero hoy podemos decir que el caso está resuelto".Incalza manifestó que "la detención de Tranchina fue casual, importante, pero no nos ayudó a detener a los componentes de la banda". Según el policía, "los inspectores españoles nos confirmaron, cuando se descubrió el rififÍ, que se trataba de un grupo de italianos, porque todo el material encontrado en el banco y en el local alquilado por los ladrones era de procedencia italiana".
"En aquel momento confeccionamos una lista de sospechosos", señaló Maresciallo de Franchesco, de 46 años, jefe de la sexta sección de la Escuadra, grupo que s e dedica a los robos de bancos. "Intervinimos teléfonos, apostamos a gentes en lugares estratégicos, realizamos seguimientos, y varios días después todo comenzó a encajar por sí solo", añadió De Franchesco, quien señaló que "en la primera operación detuvimos a los sospechosos a la misma hora en Roma, Venecia y Bolonia, para evitar que algunos escaparan. Fue una operación compleja por la disparidad y distancia entre las ciudades, pero salió bien".
Incalza explicó, además, que "hemos colaborado estrechamente con la policía española desde el primer momento, a través de un agente de Interpol, que se trasladó a Barcelona, y gracias a que Alberto Rugeri, jefe accidental de Interpol en Roma, coordinó los esfuerzos de ambas policías".
Según Incalza, "la policía española no nos dio las huellas que encontró en el banco, pero el agente de Interpol logró que una mujer de Barcelona reconociera a Franca Cavallari como la mujer que alquiló el local de la calle de Les Moles y entonces empezamos a actuar sobre una pista ya concreta".
Doble seguimiento
El seguimiento de la bella Franca, que llevó a la policía a recorrer las boutiques más lujosas de Venecia, y el de Mario Proietti, el hombre que tomó un avión en El Prat con destino a Roma, el mismo día en que se descubrió el rififí, demostraron que las sospechas de la policía romana y la información enviada desde Barcelona eran correctas. Franca no paraba de comprar, y Mario Proietti, cada noche, utilizando un pasaporte español falso a nombre de Bonifacio García Molero, cambiaba divisas en la caja del casino del Lido veneciano, por fichas que no utilizaba y que, posteriormente, cambiaba por liras italianas. "Proietti también cambió monedas en agencias de viaje", dijo Incalza, antes de presentar a Nicola Cavaliere, jefe del Grupo de Homicidios."Yo participé en el esclarecimiento del robo del Banco de Andalucía, de Marbella, porque el cerebro de aquel robo era un terrorista que había matado a dos policías en Roma", declaró Cavaliere, de 37 años, soltero, al que su camisa rosa y sus pantalones de alpaca, le dan un aspecto inusual entre la policía. "En el caso de Marbella, tuve que ir a Londres a detener al organizador del asalto, Luchianno Petrone, aunque ahora he participado en esta investigación porque conozco a algunos de los detenidos que, contrariamente a aquél, se caracterizan por ser no violentos".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.