Asesinado en El Cairo el canciller de la Embajada israelí

El canciller de la Embajada israelí en El Cairo, Albert Atrakchi, de 30 años, fue asesinado ayer en la capital egipcia por tres individuos armados, cuando se dirigía desde su domicilio al trabajo en su propio coche. Su esposa, Elena, de 24 años, y su secretaria, Mazal Minsha, de 22, que viajaban en el mismo automóvil, resultaron heridas. La autoría del atentado fue reclamada por un grupo autodenominado Revolución de Egipto, que ya el año pasado se responsabilizó de otro ataque contra un diplomático israelí en este país, aunque en aquella ocasión no se produjeron víctimas.

Un portavoz de la policía egipcia informó que, de acuerdo con la declaración de un testigo presencial, el diplomático israelí, que conducía un Volkswagen azul, fue interceptado por otro vehículo -un Fiat rojo, según un testigo, que tomó la matrícula- en el que viajaban tres hombres. Uno de los atacantes salió del coche armado con un fusil automático, corrió hacia el automóvil del canciller y le disparó a quemarropa a través de la ventanilla. Atrakchi recibió cinco impactos de bala y murió en el acto. Su esposa y su secretaria, que resultaron heridas, fueron trasladadas al hospital de El Salam, donde se les extrajeron sendos proyectiles. La policía encontró 17 casquillos en el interior del vehículo y algunos más esparcidos en el suelo.El hecho se produjo a las 8.30 de la mañana a pocos metros del domicilio del diplomático, en el barrio residencial de Maadi, al sur de El Cairo, que habitualmente es vigilado por las fuerzas de seguridad egipcias, precisamente por residir en él la mayoría de los miembros de la delegación israelí en Egipto.

El ministro egipcio de Asuntos Exteriores, Esmat Abdel Meguid, calificó el atentado de "acto criminal" y aseguró que las autoridades egipcias "adoptarán las medidas oportunas para detener a los culpables y llevarlos a juicio". Abdel Meguid envió un telegrama de condolencia a su homólogo israelí, Isaac Shamir.

Segundo atentado

Éste es el segundo atentado contra los representantes diplomáticos israelíes en Egipto desde la apertura de la Embajada en El Cairo, en febrero de 1980, tras la firma de los acuerdos de paz de Camp David, en 1979. Precisamente el grupo Revolución de Egipto, que ya se responsabilizó del anterior atentado, el 4 de julio de 1984, se atribuyó la autoría de este nuevo ataque en un mensaje entregado ayer a una agencia internacional de noticias en El Cairo. La nota mecanográfica decía: "Nuestros valientes hombres armados lanzaron hoy, en defensa de nuestra libertad y dignidad, un ataque contra miembros de los servicios de espionaje israelíes en El Cairo...".

Según observadores en El Cairo, resulta significativo que este atentado se haya cometido 24 horas antes de la visita a Israel del ministro egipcio de Turismo, Waguih Shindy, y el mismo día en que se anunciaba la invitación de Abdel Meguid a Shamir para entrevistarse el mes próximo en Nueva York durante la Asamblea General de la ONU.

Egipto es el único país árabe que mantiene relaciones diplomáticas con Israel. No obstante, desde que en 1982 retiró a su embajador en Tel Aviv, con motivo de la invasión israelí de Líbano, las relaciones entre ambos países se mantienen "al mínimo que permiten los acuerdos de Camp David", según fuentes diplomáticas en El Cairo. Además, está el contencioso de Taba, zona de un kilómetro cuadrado en el golfo de Aqaba, en poder de Israel, que reclama Egipto.

Oficialmente el viaje que Waguih Shindy tenía previsto realizar hoy pretende incrementar las relaciones turísticas entre Egipto e Israel. Sin embargo, fuentes oficiosas en El Cairo estimaron que el ministro egipcio tiene como misión descongelar el asunto de Taba, cuya solución es una de las condiciones que ha puesto el presidente egipcio, Hosni Mubarak, para entrevistarse con el primer ministro israelí, Simón Peres.