Pérez de Cuéllar visita Marruecos para reactivar la mediación de la ONU en el conflicto del Sáhara

El conflicto del Sáhara occidental, la recientemente avivada tensión entre Marruecos y Argelia y la cumbre árabe que el rey Hassan II intenta reunir dentro de una semana en Rabat fueron los temas tratados por el secretario general de las Naciones Unidas, Javier Pérez de Cuéllar, durante la visita de tres días que efectuó a Rabat y que finalizó ayer, según fuentes marroquíes. Pérez de Cuéllar abandonó ayer Rabat, después de entrevistarse dos veces con Hassan II y conversar con el ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Abdelatif Filali, y el presidente del Parlamento marroquí, Ahmed Osman.

A lo largo de su estancia en Marruecos y en las declaraciones que formuló a la Prensa en el aeropuerto poco antes de marcharse, Javier Pérez de Cuéllar insistió, se supone que protocolariamente, en que su visita a Marruecos "no responde a ninguna mediación en él conflicto del. Sáhara, sino que se trata so lamente de cumplimentar una invitación del rey Hassan II".Al margen de esas proclamaciones diplomáticas, lo esencial de la visita de Pérez de Cuéllar a Marruecos y de sus entrevista con el rey Hassan II, estuvo con sagrado fundamentalmente a conflicto del Sáhara, con mucho más motivo, por cuanto Pérez de Cuéllar venía de asistir a la vigesimoprimera cumbre de la OUA, de Addis Abeba, en donde se entrevistó también con el presiden te argelino Chadli Benyedid y el presidente de la República Ara be Saharaui Democrática (RASD), Mohamed Abdelaziz.

Visita discreta

A pesar de la discreción que ha rodeado a esta visita, algunas fuentes próximas a la misión de la ONU en Rabat precisaron que la resolución AC/40 de la pasada Asamblea General, que señala como "partes en el conflicto del Sáhara a Marruecos y al Polisario" solicita también conversaciones directas para el cese el fuego y la celebración del referéndum entre Marruecos y el Polisario, y recaba la colaboración del secretario general de la ONU para que ese referéndum se lleve a cabo y se establezca previamente el necesario cese el fuego.

Por ello, Pérez de Cuéllar dijo al partir que había tratado de informarse de los puntos de vista del rey Hassan II a este respecto. La participación de las Naciones Unidas fue solicitada por la resolución 140 de la cumbre de la Organización para la Unidad Africana (OUA) de 1983 que ha sido prácticamente recogida en la citada recomendación de la ONU AC/40.

Marruecos ha ratificado a Pérez de Cuéllar su disposición de llevar a cabo el referéndum de autodeterminación, pero, al parecer, el rey Hassan II se mostró una vez más inflexible en cuanto a que funcionarios marroquíes conversen directamente con el Polisario. La elección de la RASD a una de las vicepresidencias de la OUA durante la reciente cumbre de Addis Abeba ha sido muy mal acogida por Marruecos, cuyo Ejército prosigue la construcción del quinto muro defensivo, ahora con grandes dificultades y alto coste en vidas humanas. El muro, que se encuentra ya cerca de Bir Anzaran, en pleno corazón tórrido del antiguo Río de Oro, debe llegar hasta Dajalak (ex Villa Cisneros).

En Rabat se ha hablado durante la estancia de Pérez de Cuéllar de "eje Argel-Dakar-El Cairo" en alusión a la elección del presidente senegalés Abdu Diuf a la presidencia de la OUA, con el apoyo de Argelia según los marroquíes, y a la entrevista sostenida en la capital etíope entre el presidente Benyedid de Argelia y el jefe del Estado egipcio Hosni Mubarak. En los medios políticos marroquíes se afirma que se trata de un intento argelino de hacer contrapeso a la unión libio-marroquí que hace a su vez grandes esfuerzos por atraerse a Sudán y a Chad.

Tensión con Argelia

La otra cuestión que parece haber sido abordada es la reciente tensión entre Marruecos y Argelia, después que hace unos días el ministro del Interior marroquí Driss Basri, acusara a la seguridad militar argelina de haber preparado a ciudadanos marroquíes para actos de sabotaje en el interior del país. La visita al puerto de Casablanca desde el mismo martes 16 pasado en que fue anunciado el presunto compló argelino, de tres unidades de la Marina de Guerra libia, que actualmente y, según información publicada en Marruecos, están destinadas a servir como buques escuela, parece sugerir que la cooperación militar libio-marroquí en caso de agresión exterior contra cualquiera de los dos firmantes del tratado del 13 de agosto de 1984 que estableció la unión árabe africana, prevista en el artículo 12, comienza a convertirse en realidad.

En todo caso este presunto compló argelino contra la estabilidad de Marruecos, y la afirmación discretamente filtrada en los medios políticos de Rabat de que en breve habrá un juicio público contra los marroquíes presuntamente entrenados por la seguridad militar argelina, y apresados por Marruecos, obligan a descartar la participación de Argelia en la cumbre árabe que intenta reunir Hassan II, y que ha sido otro tema que ha interesado a Pérez de Cuéllar debido a su posible incidencia sobre el conflicto de Oriente Medio y las soluciones que actualmente se barajan.