Un juez pone en libertad a un detenido ilegalmente por tener una pistola de fogueo

El titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Madrid, Nicanor Fernández Puga, ha ordenado la inmediata puesta en libertad de Enrique Arenas García, detenido por la tenencia de una pistola de fogueo. El magistrado decretó también la deducción de testimonio y la iniciación de diligencias previas "para la persecución de la detención ilegal". La resolución judicial se produjo tras la solicitud de hábeas corpus -derecho a que el juez vea y oiga al detenido- por el padre del detenido.

José María Arenas Romero compareció el pasado viernes ante el Juzgado de Guardia y manifestó que su hijo se encontraba detenido "al parecer ilegalmente", por lo que solicitaba la protección legal del hábeas corpus. Se dio cuenta al Ministerio Fiscal, que se pronunció en favor del procedimiento. El magistrado Fernández Puga oyó al detenido y a su abogado, así como al fiscal y al jefe de servicio de la comisaría de Chamberí, bajo cuya custodia se hallaba Enrique Arenas.

En el único considerando de la resolución judicial se señala que el motivo de la detención es la tenencia por parte de Enrique Arenas de una pistola de fogueo, hecho que, a juicio del magistrado, no puede ser constitutivo del delito tipificado en el artículo 254 del Código Penal, sobre tenencia de armas de fuego. En consecuencia, y de acuerdo con la ley de Hábeas Corpus, el juez Fernández Puga ordenó la inmediata puesta en libertad del detenido "al haber sufrido una detención ilegal", para cuya persecución ordenó deducir testimonio e iniciar diligencias previas.

Según informó a EL PAIS Juan Manuel Hernández Rodero, abogado del detenido, "es normal que un policía detenga a una persona que lleva una pistola", por lo que, en su opinión, las responsabilidades que ahora habrá que perseguir no recaen contra quien ordenó o practicó la detención, sino "contra la persona que, una vez comprobado que se trataba de una pistola de fogueo, ordenó que su portador permaneciera detenido".