_
_
_
_
TRIBUNALES

Un juez de Madrid declara la paternidad de un fallecido cuyos familiares se negaron a hacerse la prueba biológica

Gabriel Gonzálvez Aguado, juez de primera instancia número 17 de Madrid, ha declarado que una persona fallecida era el padre de la hija de una madre soltera. El juez se basa, entre otras cuestiones, en que los familiares del finado -el padre y los hermanos del difunto- no accedieron a someterse a la prueba biológica para determinar si la, hija desciende de esa familia. La decisión judicial ha sido recurrida a la Audiencia Territorial, pero, de confirmarse, la hija tendrá derecho a llevar el apellido del difunto y a disfrutar de una pensión. Es la primera vez en España que un juez declara la paternidad de una persona fallecida.

Más información
Un elemento casi decisivo

El juez ha declarado probados los hechos principales en que se funda la demanda, que son los siguientes: la madre de la niña y el fallecido, solteros ambos, pues se había declarado la nulidad de un matrimonio anterior de la primera, mantenían relaciones extramatrimoniales "serias y continuadas", fruto de las cuales nació una niña que fue reconocida por la madre e inscrita en el registro con los apellidos de la madre invertidos. La hija nunca fue negada como tal por el fallecido, y en todo momento estuvo en posesión continuada de estado de hija no matrimonial. Si el padre no la reconoció antes de su fallecimiento, momento en el que la niña tenía dos años, fue porque la madre le exigió que dejase previamente liquidadas otras relaciones. de convivencia que con anterioridad sostenía con otra mujer y que la madre pensaba que podían perjudicar a la niña.

Sin testamento

El hombre falleció por accidente de trabajo y no dejó testamento. La madre y la niña asistieron a los funerales y entierro, donde los familiares del difunto conocieron a la niña, de la que ya tenían noticias, y no pudieron ocultar su emoción, según consta en uno de los resultandos de la sentencia.La madre, a través de la abogada María Telo, presentó la demanda de declaración de paternidad contra el padre del fallecido, heredero legal del difunto. El padre del finado negaba que su hijo fuera el progrenitor de la niña. El padre del difunto se oponía a la declaración de paternidad por entender que la madre mantenía relaciones íntimas con más de un hombre en la época de presumible concepción de la niña, aunque no aportó pruebas sobre este aspecto. El juez precisa que, de todas formas, el argumento no puede admitirse porque la investigación de la paternidad se ejercita en nombre del hijo, como un derecho propio de éste, y no como una especie de anexo de antigua acción de daños y perjuicios de la madre. El que la madre mantuviera relaciones con varios hombres ya no constituye impedimento para averiguar la paternidad, y de esta antigua excepción, "afortunadamente, añade el juez, "ya no queda rastro en nuestro actual sistema jurídico, al que la evolución de las ideas y los logros de la ciencia permiten llegar a soluciones más justas".

El juez ha considerado ciertos los hechos expuestos en la demanda basándose en abundante documentación auténtica, constituida principalmente por una serie de cartas y notas privadas manuscritas por el presunto padre que ponen de relieve "hechos singularmente significativos": la existencia de íntimas relaciones personales, que compartían una misma vivienda, y el conocimiento y aceptación del embarazo y paternidad. Si bien es cierto que en ninguno de ellos se hace una confesión expresa, sus términos no admiten otra interpretación que la de un reconocimiento inequívoco de la paternidad". Por último, el juez sefíala que se impone declarar la paternidad del fallecido, conjugando la negativa del demandado a someterse a la prueba biológica, "negativa fundada en el temor a conocer la verdad y sobre todo a soportar sus consecuencias", con el resto de las pruebas practicadas acreditativas de las relaciones sexuales de la pareja hasta la muerte del hijo del demandado.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_