Boyer apuesta por la regresión fiscal si genera empleo

"Si hay que elegir entre la progresividad fiscal o la regresión para que crezca el empleo, elijo, sin duda, esta última vía en las condiciones actuales" señaló el ministro de Economía y Hacienda, Miguel Boyer, ante la asamblea de presidentes de organizaciones sectoriales y territoriales integradas en la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE). José María Cuevas, presidente de la patronal, pidió el establecimiento de nuevos canales de discusión entre el empresariado y la Administración para tratar de llegar a acuerdos en los temas que están pendientes desde hace meses. Igualmente, aludió a la integración en la CEE.

Miguel Boyer, en su intervención ante los empresarios, se decantó completamente por introducir modificaciones en el sistema fiscal español en la misma línea que se viene haciendo en otros países donde se está produciendo, o se ha producido ya, un cierto relanzamiento de la inversión y de la generación de empleo. Estos cambios se orientan a devolver parte del peso perdido a los impuestos indirectos, que suelen penalizar el consumo, y reducir la importancia de los directos para que de esta forma no se mantenga la penalización del ahorro. Ello, señaló el ministro, aunque suponga que los impuestos directos pierdan progresividad porque "no hay mayor regresividad que aquella que enfrenta a los que tienen empleo con los que están parados".

El ministro de Economía señaló que la implantación del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) el primero de enero del año próximo supone un reto importante para la sociedad española y que, aunque contiene elementos distorsión adores sobre la inflación, también se dan otras circunstancias que pueden reducir su impacto de forma casi total. El año próximo, como consecuencia de la entrada en el Mercado Común, aumentarán las importaciones de ciertos productos, lo que presionará menos sobre sus niveles de precios en el mercao interior. En este mismo sentido señaló que los precios de los productos agrarios, al discutirse en la Comunidad Económica Europea (CEE), tendrán incrementos de precios inferiores a los que se aplican normalmente en España, a pesar e que los precios en España aumentarán algo más, tendiendo a igualarse con los que rigen en los países europeos. La tendencia a la baja del dólar en los últimos meses, y las previsiones de que esto continue así, permite, a juicio de Miguel Boyer, pensar en unas tensiones de precios inferiores por lo que se refiere a importaciones e productos.

En lo que se refiere a los impuestos directos, Boyer volvió a señalar que el Gobierno mandará un proyecto de ley al Congreso para aplicar en la tarifa el impuesto sobre la renta de este año la baja acordada en las retenciones a cuenta y que se aprovechará, además, para acabar con situaciones injustas fiscalmente como es el caso de las familias en las que trabajan los dos cónyuges. Miguel Boyer aceptó las críticas realizadas por CEOE en el sentido de que el impuesto sobre la renta penaliza el ahorro señalando que todos los impuestos progresivos lo hacen y que se instrumentan medidas para tratar de corregir estas desviaciones.

Igualdad de trato

José María Cuevas, en su intervención ante el ministro de Economía señaló los importantes problemas que se plantean ante la incorporación al Mercado Común y pidió "mayor libertad para las empresas, sin privilegios para ninguna, coordinada con la responsabilia social que tienen". El presidente de CEOE declaró que los empresarios no creen en subvenciones o apoyos para la actividad empresairal pero que era necesario "que las reglas de juego sean las mismas para todos". Esto era una clara referencia a las disposiciones sobre bonificaciones en la contratación a nuevos trabajadores o las facilidades que se están instrumentando para la creación de nuevas empresas, frente a las rigideces que se mantienen para las ya existentes.

Cuevas pidió a Boyer que el Gobierno instrumentara las formas necesarias para tratar e alcanzar un compromiso sobre seis puntos que preocupan en especial a los empresarios. Los temas propuestos se referían a la Seguridad Social "el actual sistema es uno de los elementos que más distorsionan el mercado y es de los más ineficaces de Europa"-; a la legislación laboral -en especial el cumplimiento del artículo 17 del Acuerdo Económico y Social, de cara a remover los obstáculos existentes para adecuar las plantillas a las condiciones cambiantes de la ,economía; el sistema fiscal, para fomentar el ahorro y la inversión; las repercusiones de la incorporación de España al Mercado Común, en especial en lo que se refiere a los sectores agrícola, ganadero y de transformación de prouctos alimenticios; lo referente a formación e información para todos los empresarios ante la incorporación a la CEE y las previsiones que el Gobierno tiene de cara a realizar inversiones en infraestructura, que permita la modernización y mejor rentabilidad del sector de distribución.

El ministro de Economía aceptó estas propuestas y anunció que las trasladaría al Gobierno aunque señaló que en algunos puntos ya se había intentado y que al no alcanzarse un acuerdo el gabinete había tenido que adoptar las medidas que consideraba necesarias ante la falta de acuerdo.

Miguel Boyer pidió a los empresarios que vieran el futuro con cierta calma y optimismo aunque la situación actual es difícil. Al margen de los datos del ajuste económico llevado a cabo en los dos últimos años, el ministro señaló como pasos importantes dados en este tiempo el hecho de que la presión fiscal sobre las empresas no ha crecido, al haberse compensado con la baja en las cotizaciones a la seguridad social, la moderación salarial alcanzada este año y que se prolonga durante el próximo en virtud del AES, la recuperación del excedente empresarial y el aumento de la tasa e ahorro interno .que es necesario que se invierta en España y no fuera de ella, como ha ocurrido en 1984".

Miguel Boyer señaló que existen algunos indicios de cierta recuperación de la inversión privada y que el Gobierno está haciendo lo posible para que se consolide. En este sentido señaló que sus previsiones apuntan a que la inversión en bienes e equipo crezca por encima del 6% este año, frente a una caída del 1% en 1984. Estas previsiones son reflejo de la buena marcha de las importaciones de este tipo de productos y del aumento del índice de producción de este sector. La construcción, que supone el 60% de la inversión total, no acaba de despuntar y por ello el Gobierno ha instrumentado nuevas medidas de relanzamiento a la vez que ha autorizado al Ministerio de Obras Públicas a que comprometa en 1985 hasta el 90% de sus inversiones previstas para el año próximo de cara a su más pronta iniciación.