El 'duro' Milewski abandona sus cargos directivos en el partido comunista polaco
Miroslaw Milewski, de 57 años, miembro del Politburó del Partido Obrero Unificado Polaco (POUP, comunista), considerado como un miembro del ala dura y que había desaparecido de la escena política a raíz del asesinato del sacerdote Jerzy Popieluszko, dimitió el martes de sus cargos directivos en el Politburó y del secretariado del comité central y abandonó también su puesto en el Comité Central del POUP. La noticia de la dimisión de Milewski se hizo pública al final del 19º pleno, de dos días, del Comité Central del POUP, que estuvo dedicado al Lugar y tareas de la intelectualidad en el desarrollo socialista de Polonia.
El portavoz del Comité Central del POUP anunció la dimisión de Milewski, y a la pregunta de si estaba relacionada con el asesinato de Popieluszko replicó que de ninguna manera. "La dimisión", dijo "se produjo por motivos personales". La noticia no sorprendió porque desde hace meses Milewski se encontraba "de vacaciones, que pueden ser largas", según el viceprimer ministro Mieczyslaw Rakowski.Casi al mismo tiempo que la destitución de Milewski, el portavoz del Gobierno, Jerzy Urban, dio cuenta de un extraño compló para asesinar al premio Nobel de la Paz y dirigente del sindicato prohibido Solidaridad Lech Walesa. Según el extraño relato, un preso de 34 años llamado Jozef Szczepanski, condenado a 11 años de cárcel en 1981, recibió un permiso para abandonar la cárcel por enfermedad. Un desconocido entabló contacto con él para proponerle un asesinato en nombre de una organización secreta. En mayo recibió el encargo de matar a Walesa a cambio de una elevada suma de dinero y un pasaporte. El preso se negó a cumplir el encargo e informó a Walesa, que ha tomado en serio el asunto, teme por su vida y presentó una denuncia ante la policía de Gdansk. Urban quitó importancia al asunto y dijo que no puede comprobarse su veracidad.
Víctima política
La caída de Milewski aumenta el poder del ministro del Interior, general Czeslaw Kiszczak, que fue el hombre puesto por el primer secretario del POUP y primer ministro, general Wojciech Jaruzelski, al frente del Ministerio del Interior, en vez de Milewski, en agosto de 1981. El enfrentamiento entre los sectores militares, apoyados por Jaruzelski y Kiszczak, frente al tradicional aparato, los servicios secretos en el Ministerio del Interior, es la hipótesis más plausible para explicar el asesinato de Popieluszko. Milewski es ahora una víctima, sólo política, del caso Popieluszko.Como es frecuente en estos casos de caídas políticas de una figura representativa de un ala del POUP, la medida parece compensada con otras. El régimen se libra de un representante del ala dura y al mismo tiempo da muestras de que está dispuesto a mantener una línea de dureza. Se ha anunciado para el próximo jueves el comienzo en Gdansk del proceso contra tres destacados miembros de la oposición que habían salido hace poco de la cárcel: el dirigente del disuelto Comité de Autodefensa de los Obreros (KOR), Adam Michnik, y los líderes de Solidaridad de Gdansk, Bogdan Lis, y Silesia, Wladyslaw Frasyniuk. Urban anunció que se hallaron 26.500 marcos (1,5 millones de pesetas) y una factura en poder del ex presidente de la Asociación de Periodistas Polacos Stefan Bratkowski, que en otoño de 1981 fue expulsado del POUP por sus posiciones críticas y antisoviéticas.
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