Brandt culpa a Kohl del desaire sufrido por los socialdemócratas
., La visita del presidente estadounidense, Ronald Reagan, y la cumbre económica de los siete grandes en Bonn han dejado una cierta resaca en la República Federal de Alemania. La polémica por la negativa de Reagan a recibir a presi ente socialdemócrata, Willy Brandt, alcanzó ayer al Gobierno federal. Brandt acusó al Gobierno de Helmut Kohl de no haber gestionado debidamente una cita para la oposición en el programa de Reagan.
En una entrevista radiofánica, el ex canciller Brandt se hizo eco de las noticias que apuntan al subsecretario de Estado norteamericano, Richard Burt, que está previsto como futuro embajador de Estados Unidos en Bonn, como causante del entuerto. Brandt declaró ayer que había oído que "el futuro embajador desaconsejó el encuentro (con Reagan)". "Si esto es cierto", añadió, "sólo puedo decir de antemano que tendrá problemas con un amplio sector de la opinión pública alernana".
Willy Brandt había rechazado la invitación del presidente de la RFA, Richard von Weizsaecker, a asistir al banquete en honor de Reagan. En la entrevista radiofónica, el presidente del Partido Socialdemócrata de Alemania, SPD, dijo que él no está irritado, sino que ha protestado "contra la desvergüenza de que un Gobierno federal no sea capaz de dar a la dirección del SPD la posibilidad de ver al presidente norteamericano".
"Yo he visto antes a seis presidentes. Aquí se ha introducido una nueva práctica y no quise ir allí para servir de decorado de un hermoso banquete", afirmó Brandt.
El portavoz del Gobierno, Juergen Sudhoff, declaró ayer que el Gobierno no es la instancia adecuada para dirigir las protestas. Según el portavoz, la función del Gobierno era presentar, sin comentarios, el deseo de la oposición socialdemócrata de mantener una entrevista con el presidente norteamericano. La Casa Blanca rechazó el proyecto, y el Gobierno de Bonn considera que no tiene nada que ver con el asunto.
Para el próximo día 14 habrá en el Parlamento federal (Bundestag) una declaración del canciller Kohl sobre la cumbre de Bonn. El SPD ha solicitado que se amplíe el orden del día a la visita de Ronald Reagan y se fijen cinco horas para el debate.
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