Ardanza muestra su "vergüenza y asco" por la violencia terrorista

José Antonio Ardanza, que hoy cumple 100 días al frente del Gobierno vasco, reconoce en una comunicación pública al pueblo vasco que el paro y la crisis económica son los principales problemas de la comunidad autónoma. Al referirse a la violencia señala "Sentimos vergüenza y asco". A la vez, insiste en la necesidad de profundizar en el desarrollo estatutario.

El lendakari -que comparecerá hoy ante los medios informativos en Vitoria- presenta como logros la disipación de las tensiones entre el Gobierno vasco y los presidentes de las Diputaciones forales -principal foco de tensión en el seno de las filas nacionalistas durante la gestión de Carlos Garaikoetxea-, y la recuperación del entendimiento con los partidos de la oposición parlamentaria y con el Gobierno central.La reanudación del diálogo y la cooperación entre los responsables del Gobierno vasco y los representantes de las Diputaciones es el factor clave, junto a la firma del pacto de legislatura con el principal partido de la oposición vasca (Partido Socialista de Euskadi), que explica la actual gobernabilidad del País Vasco bajo el mandato de José Antonio Ardanza, que cuenta con el apoyo mayoritario de la dirección del PNV. El lendakari señala, en este sentido, que era imprescindible mejorar las relaciones con los que no piensan como nosotros, porque en Euskadi hay gentes de ideologías diferentes; y todos ellos vascos. Hemos mejorado el entendimiento con la oposición, y más en particular con el Gobierno central. La estabilidad comienza a dar sus frutos".

El presidente del Gobierno vasco señaló que hay que acabar con la violencia. "Es un problema de dignidad personal. Todos somos conscientes de que la situación es sustancialmente mejor que hace tres, cuatro o cinco años, pero no es suficiente. Todavía nos pueden hacer mucho daño, y de hecho ya nos lo están haciendo. Hay que superar la comodidad y el miedo y decir valientemente que se están comportando como los peores enemigos de este país; que cada vez que sabemos que un vasco, por muy patriota que diga ser, ha cometido semejantes atrocidades, sentimos vergüenza y asco. No nos valen sus excusas".

Tras señalar que el Estatuto de autonomía es "el instrumento válido para la reconstrucción de Euskadi", Ardanza dijo que es preciso no sólo conservar su espíritu y su letra, sino que es necesario desarrollarlo al máximo. El lendakari finalizó su mensaje diciendo que el Gobierno vasco tiene que estar por encima de polémicas partidistas.