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Los sindicatos contra el gobierno en el Primero de Mayo

Política económica y OTAN centraron las críticas de CC OO

Las críticas contra la política económica del Gobierno y la OTAN constituyeron ayer el tema central de la manifestación convocada por CC OO en Madrid, que, según los organizadores, contó con la asistencia de 200.000 a 250.000 personas. Pese a las dificultades que el cálculo entraña, las estimaciones más generalizadas apuntaban, sin embargo, una cifra de alrededor de 100.000 personas.La manifestación, convocada bajo el lema "Paz, Trabajo y Seguridad Social", fue encabezada, entre otras personas, por el secretario general del sindicato, Marcelino Camacho, el secretario general de Madrid, Juan Moreno, y los secretarios confederales de Relaciones Políticas e Institucionales, Julián Ariza, de Empleo, Salce Elvira, y de Información, Antonio Gutiérrez. También figuaraba el viejo líder sindical de la construcción Macario Barja. Todos ellos caminaban tras una gran pancarta en la que se pedía el cambio de la política económica. En segundo término se podía ver al secretario general del Partido Comunista de España, Gerardo Iglesias. Por su parte, Santiago Carrillo, asistió como un militante de base más.

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La manifestación partió del paseo de las Delicias con la participación de algunas charangas contra la permanencia en la OTAN, tema que adquirió enorme importancia por encima a veces del paro y la reforma de la Seguridad Social. Junto a consignas como "Reagan cuatrero, fascista y pistolero", los lemas más coreados fueron los de "CC OO, sindicato trabajador" y los dirigidos contra la central UGT y el presidente del Gobierno. "Redondo, observa, Felipe está en la sierra" o "Redondo, aprende, Camacho no se vende". La mayoría de las pancartas aludían al empleo y la paz y, además de banderas de distintas comunidades autónomas, se pudieron ver algunas con los colores republicanos.

El acto central de la manifestación tuvo lugar en la plaza de la Independencia desde donde Marcelino Camacho se dirigió a los manifestantes con un discurso lleno de duras críticas a la política del Gobierno, especialmente a la económica y de defensa.

Tras señalar que ni el puente ni el buen tiempo pueden con la central -"CC OO aunque se ase no se deshace"- Marcelino Camacho afirmó que caminamos hacia una Europa "que será la de los mercaderes, los monopolios y la OTAN y no la de los trabajadores, la amistad y la paz".

Desunión sindical

El líder sindical lamentó una nueva celebración del Primero de Mayo marcada por la desunión sindical, y aludió a la ausencia de Felipe González en la fiesta-mitín de la central socialista. "Tras 29 meses de su llegada al poder", aseguró, "Felipe no puede presentarse siquiera ante los trabajadores de su sindicato"En su larga intervención el dirigente sindical abogó por una reducción de la jornada y criticó el Acuerdo Económico y Social. Marcelino Camacho afirmó que ningún Gobierno en la historia de la transición había ido tan lejos en su política antisocial y antisindical, y añadió que el Ejecutivo sólo piensa en sucederse a sí mismo".

Al referirse a la reforma de la Seguridad Social pidió la unidad de acción con UGT "para hacer fracasar el ataque del Gobierno y la CEOE" y celebró las críticas de la central socialista con respecto al proyecto. Sin embargo, Camacho advirtió que parte de la dirección de UGT "podrían practicar el doble juego".

A la intervención del secretario general de CC OO precedió la de Juan Moreno y un representante del Movimiento Madrileño por la Paz.

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