Tres policías nacionales, heridos en Pamplona al estallar un coche bomba que contenía seis kilos de Goma 2

Tres policías nacionales resultaron ayer heridos de diversa consideración en Pamplona al hacer explosión un coche bomba en las inmediaciones de la vivienda M vicepresidente del Gobierno de Navarra, José Antonio Asiáin, lugar donde cada mañana acudía una dotación policial para cubrir la salida del político. Según la delegación del Gobierno en Navarra, en esta nueva acción terrorista, presumiblemente perpetrada por ETA Militar, se emplearon entre seis y siete kilos de Goma 2. El atentado ocurrió a las 8.23 de ayer, poco después de la Negada de la dotación policial de vigilancia.

Una vez que los dos vehículos de la Policía Nacional se colocaron en la parte trasera del domicilio del vicepresidente del Gobierno de Navarra, en la confluencia de las calles Pintor Ciga y Pintor Basiano, a la espera de que José Antonio Asiáin saliera con dirección a la Diputación Foral, se produjo el atentado. En ese momento, un artefacto colocado en el interior de un vehículo aparcado junto a una de las furgonetas policiales fue activado a distancia. Fueron alcanzados los componentes de la dotación por el fogonazo de la explosión y la onda expansiva de la bomba.El policía nacional Domingo Salazar Farnos, de 28 años, natural de Rasquera (Tarragona), fue el más afectado por la explosión. Sufre quemaduras de tercer grado en la cara y ambas manos, por lo que se recomendó su traslado a la residencia Miguel Servet, de Zaragoza.

Heridas menos graves

Los otros dos miembros de las fuerzas de seguridad heridos, Modesto Tribaldos Pinarejos, de 42 años de edad, natural de la localidad valenciana de Benifarnó de Baldizna, así como Serafin Montes Delgado, de 30 años, natural de Jaén, fueron atendidos en los centros hospitalarios de Pamplona de heridas menos graves. Este último fue dado de alta poco más tarde y los otros dos policías nacionales evolucionan favorablemente.

Como consecuencia de la explosión de la bomba, compuesta por Goma 2 y varios kilos de tuercas y tornillos, al menos 10 vehículos aparcados junto al coche-bomba sufrieron desperfectos de importancia, así como una sucursal de la Caja de Ahorros de Pamplona y el establecimiento Electrificaciones Luna, situados igualmente a escasos metros. Parte de la metralla del explosivo se incrustó en las fachadas de los edificios colindantes y las ventanas de las viviendas situadas en un área de 100 metros quedaron dañadas por la onda expansiva. Algunas de las piezas del vehículo en el que fue colocado el explosivo -un Renault blanco matrícula NA1924-K, sustraído horas antes- fueron lanzadas a una distancia de más de 50 metros.

"Hemos tenido mucha suerte", manifestó el delegado del Gobierno en Navarra, Luis Roldán, tras inspeccionar el lugar en el que se produjo el atentado. En opinión de Luis Roldán, la hora y el lugar en que éste se produjo podían haber ocasionado numerosos heridos, máximeteniendo en cuenta la salida, en las proximidades, de varios autobuses con destino a los numerosos centros escolares de la zona.

El Gobierno de Navarra, por su parte, condenó ayer en un comunicado esta actuación terrorista contra efectivos de la Policía Nacional, que "repele e indigna a la sensibilidad humana de cualquier ciudadano y pone de manifiesto, una vez más, los salvajes métodos de las bandas armadas que pretenden desestabilizar el sistema democrático y de libertades que nuestro pueblo se ha autoestablecido".

En este sentido, el Gobierno de Navarra anuncia que "apoyará inflexible y tenazmente la defensa de las libertades democráticas y colaborará con las autoridades del Estado para atajar esta lacra irracional del terrorismo".