Los políticos brasileños pasaron la noche en vela esperando la muerte de Neves

Brasil amaneció ayer a la espera de que se divulgara en cualquier momento la noticia de la muerte del presidente electo, Tancredo Neves. Los políticos brasileños pasaron la noche en vela. Desde la tarde del domingo, los boletines médicos emitidos por el equipo que asiste al septuagenario político advertían de la gravedad de la situación. Con la familia y con el vicepresidente en ejercicio, José Sarney, los médicos fueron más explícitos: Tancredo Neves sobrevive gracias a los aparatos a los que está conectado desde el pasado jueves, y la situación es irreversible. Nada más puede hacerse por medios terapéuticos.La noticia de la irreversibilidad ole la situación de Tancredo Neves provocó un fuerte sentimiento de tristeza en la multitud que, atraída por los informativos de televisión, se concentra ante las puertas del hospital de Clínicas, en São Paulo. Allí hay pequeños altares populares de todos los credos practicados por los brasileños, desde el catolicismo hasta múltiples variantes de las religiones africanas.

Lejos de allí, en Brasilia, la capital, los políticos pasaron la noche expectantes. El Gobierno del vicepresidente José Sarney ya tiene todo previsto para la celebración de los funerales en Brasilia y redactado el mensaje que leerá en cuanto se produzca la noticia oficial de la muerte de Neves.

Desde el pasado viernes, cuando quedó patente la irreversibilidad de la situación del presidente electo, los medios políticos se enfrentan a una situación de grave tensión. En Río, el domingo circularon rumores indicando un posible reajuste en el Gobierno nombrado por Neves. Políticos cercanos al Gabinete admiten que corresponderá a Sarney adoptar una decisión en este sentido, principalmente cuando se trate de carteras de confianza a nivel personal.

Junto a los rumores sobre una reorganización ministerial, se han multiplicado en las últimas horas los indicios de que el respaldo prácticamente unánime de los partidos políticos a José Sarney difícilmente se mantendrá por tiempo indeterminado.

Con la muerte de Tancredo Neves empezarán tiempos de incertidumbre para la "nueva República" que él anunció.