Bettino Craxi señala que aún no se puede concretar cuándo se firmará el tratado de adhesión de España a la CEE
El primer ministro italiano, Bettino Craxi, declaró ayer que "en este momento no estamos aún en condiciones de concretar cuándo podremos firmar" el tratado de adhesión con España, aunque "espero poderlo firmar yo" como presidente del Consejo Europeo, lo que implica que ello deba ser antes del 1 de julio. Craxi añadió que, una vez firmado, lo lógico será solicitar un procedimiento rápido de ratificación en los Parlamentos. "No hay obstáculos insuperables, y si los hubiera los superaremos, aun cuando suponga un retraso". Por la mañana, fuentes próximas a la presidencia italiana señalaban la posibilidad de que la cumbre se pronunciase hoy sobre la fecha de la firma. Pero las palabras de Craxi vienen a desmentir esta idea.
Ya casi se ha olvidado la Europa a diez, pues no se habla más que de la Europa a doce, una Comunidad Económica Europea de 320 millones de consumidores. El Consejo Europeo de Jefes de Estado y de Gobierno de la CEE que se abrió a mediodía de ayer en Bruselas se felicitó del acuerdo alcanzado en la madrugada de ayer en las negociaciones de adhesión con España y Portugal. "Hemos respetado el plazo de una cita histórica", declaró el presidente de la reunión, Bettino Craxi, primer ministro italiano. Hacia las 4.30 de ayer, el ministro italiano Giulio Andreotti aseguró solemnemente: "Nos ponemos en disposición de cumplir la fecha del 1 de enero de 1986" para el ingreso "gracias a una firma y a una ratificación rápida" del tratado de adhesión."Europa puede mirar ahora hacia el futuro con una confianza renovada", declaró Craxi. Jacques Delors, presidente de la Comisión Europea, declaró por su parte que España y Portugal se iban a unir a la CEE "en un esfuerzo común que tiende hacia un mismo ideal". El ministro español Fernando Morán hablé de que la adhesión a la CEE acaba con años de "frustración y de complejos de inferioridad internacional" en España.
Para Morán, "Europa es necesaria no sólo para nuestras economías, sino porque significa estar donde tenemos que estar", añadiendo que bajo la dictadura "Europa tenía un valor político, Europa equivalía a la democracia".
Fernando Morán, por su parte, no dudó en afirmar que España se sentará en el primer Consejo de Ministros de la CEE en enero de 1986. Morán también señaló que se mantiene el referéndum sobre la OTAN, y opinó que no se convocarán elecciones anticipadas en España.
Firmar en junio
"Si no es el 1 de enero, será el 1 de febrero, o el 1 de marzo", declararon ayer fuentes comunitarias. Para el ministro español, tras el acuerdo sobre agricultura, pesca, asuntos sociales, Canarias y contribución española al presupuesto de la CEE, se puede pensar en firmar el tratado de adhesión en junio.
El portavoz del presidente francés, François Mitterrand, Michel Vauzelle, declaró ayer que "se ha pasado una página en la historia de la construcción europea", y habló de "un reequilibrio de la Comunidad, que sirve los intereses franceses tanto como los europeos".
Morán se dirigió también a su colega portugués, Ernani Lopes, al expresar "su satisfacción" por el acuerdo. Pues "somos dos pueblos destinados a comprenderse bien", por lo que "ambos Gobiernos deben sacar de ello todas las consecuencias". De hecho, el lunes en Madrid se reanudarán las conversaciones técnicas hispano-lusas para fijar el capítulo de las relaciones entre España y Portugal durante el período transitorio, tanto en el tema pesquero como en el comercial. Lopes recordó que el jueves se habían cumplido ocho años desde la demanda de adhesión portuguesa, y en la madrugada de ayer lanzó un "gloria a Europa".
Agricultura, pesca y asuntos sociales quedan como se señalaba ayer en estas páginas, salvo que el período transitorio para la libre circulación de trabajadores en Luxemburgo queda con diez años (frente a los siete generales).
En lo referente a la contribución española al presupuesto de la CEE, España ha logrado aumentar mínimamente su posición, ya que el primer reembolso será de un 87% (en vez del 85%) de su contribución del IVA en el primer año, lo que representa una propina adicional de unos 4.000 millones de pesetas. Es menos que lo que quería España. Pero, al filo de la madrugada, cuando Portugal aceptó lo que se le ofrecía, Morán rápidamente cambió de posición y aceptó también la última oferta de los diez, llegando así al acuerdo.
Estatuto de Canarias
En cuanto a Canarias, respecto a la anterior oferta de la CEE, sólo hay mínimas mejoras, en lo referente a los plátanos, al tabaco y al ajuste de los contigentes arancelarios. No se excluye una evolución de los contigentes de productos de la pesca si Canarias desarrolla su propia flota.
En cuanto al acceso de Canarias a los fondos estructurales de la CEE, se determinarán por mayoría entre los diez. En el fondo, lo que la Comunidad Económica Europea plantea es que Canarias acabe pidiendo su integración en la Unión Aduanera de la CEE, pues se recorta actualmente su posibilidad de desarrollo en algunos terrenos.
Canarias conserva su estatuto de puerto franco, pudiendo seguir exportando hacia la CEE y hacia España. Está exenta de la aplicación del Impuesto sobre el Valor Añadido, pero el archipiélago cotizará al presupuesto de la CEE por medio de una cantidad global, a fijar, y que correrá a cargo del Estado español.
