Un 93% de las prestaciones sanitarias será financiado con las tasas de la Seguridad Social

La ley general de Sanidad se financiará sustancialmente con cargo a las cotizaciones a la Seguridad Social (que actualmente cubren la asistencia al 93% de la población) y con los presupuestos generales (para añadir un 4% más), mientras que el 3% restante, que corresponde a un sector con suficientes recursos económicos, pagará por cada servicio la asistencia sanitaria pública. Estos datos, que fueron confirmados ayer por el ministro de Sanidad y Consumo, Ernest Lluch, a los medios informativos, son fruto del acuerdo a que llegaron la semana pasada el presidente del Gobierno y los titulares de Sanidad; de Hacienda, Miguel Boyer, y de Trabajo, Joaquín Almunia.

MadridEn un acto en el que presentó la Guia Farmacológica para la Asistencia Primaria, el ministro de Sanidad explicó, no obstante, que bajará el porcentaje de las cotizaciones a la Seguridad Social pero no especificó en qué cuantía concreta. Sobre la cobertura al 4% de la población marginal, que no tiene recursos para pagar a la Seguridad Social, Lluch dijo que costará al Estado aproximadamente 30.000 millones de pesetas y que estos beneficiaríos tendrán una cartilla igual a las de los otros benefucuarios y gozarán también de los mismos derechos. Sobre la financiación de vas prestaciones sanitarias que contempla la ley para servicios de psiquiatría, estomatología, medicina comunitaria, etcétera, el ministro dijo que el Estado pagará estos servicios en la me dida que haya recursos presupuestarios. Lluch descartó, por otra parte, el uso del llamado ticket moderador, excepto en la adquisición de productos farmacéuticos. No habrá tasas, por tanto, según dijo el ministro, en hospitalización y en otras prestaciones.En relación con la ley de Sanidad la Comisión Ejecutiva Confederal de UGT ha hecho público un comunicado en el que dice que el modelo de financiación adoptado para esta ley conculca el principio de universalización, ya que condiciona la existencia de tres categorías de ciudadanos: los protegidos por la Seguridad Social, los indigentes protegidos por el Estado y los privilegiados que pueden acudir al sistema público como privados.

Malestar en UGT

Los reprentantes de UGT estiman que el proyecto de ley de Sanidad en su actual redacción produce una quiebra del modelo sanitario socialista "por las razones ya indicadas y porque se siguen manteniendo algunas modificaciones hechas por la Organización Médica Colegial; continúa sin contemplarse la participación efectiva de los sindicatos representativos en los órganos de gestión del sistema sanitario y porque no se establece la subsidiariedad del sector privado respecto del público".En el mismo encuentro con el ministro, el director general del Instituto Nacional de la Salud (Insalud), Francesc Raventós, dijo sobre el conflicto que enfrenta a las clínicas privadas con la administración sanitaria, que es verdad que el Insalud adeuda determinadas cantidades a estas clínicas, pero que en el caso concreto de los empresarios de clínicas privadas de Murcia se está produciendo un chantaje a la Administración. Estas clínicas han decidido romper el concierto co nel Insalud y han anunciado que a partir del día 1 de abril no recibirán enfermos de la Seguridad Social.

Raventós ha señalado que esta medida es ilegal tanto por tratarse de servicios públicos esenciales como porque no se ha comunicado la denuncia del concierto con los plazos previstos. Por todo ello el Insalud está estudiando la adopción de medidas administrativas y de otro tipo, según ha manifestado el director de este organismo.

La Guía Farmacológica, editada por Sanidad y distribuida a 100.000 médicos y farmacéuticos, fue presentada por el director de Farmacia, Felíx Lobo.