En carne propia

Fernando Gómez Castresana sabe por experiencia lo que es una hernia de disco y ha experimentado en carne propia las ventajas de la quimionucleolisis, que comenzó a aplicar a sus pacientes hace apenas un mes. "Soy partidario de las técnicas cerradas frente a la cirugía, porque son menos agresivas, y por eso he seguido con gran interés la evolución de esta técnica desde 1980, con frecuentes visitas a Canadá, donde existe una gran experiencia", indica el médico madrileño.Cuando el verano pasado sufrió una hernia de disco no lo pensó dos veces. Se puso en contacto con Carl Sutton, un traumatólogo canadiense pionero en la aplicación de esta técnica, y en diciembre fue a Canadá para que le inyectara la quimopapaína. "Al día siguiente ya pude pasear por Montreal", recuerda Gómez Castresana, que todavía no puede olvidar el dolor ciático y la efectividad del derivado de la papaya. "En algunos centros canadienses se realiza esta técnica con anestesia local y te impresiona ver a los pacientes quejándose hasta el mismo momento en que se les inyecta la quimopapaína. La reacción es fulminante: el enfermo lanza un suspiro de alivio y se queda relajado, como después de un parto".