Reservas en Coalición Popular y Euskadiko Ezkerra ante el pacto de legislatura

La satisfacción porque el pacto de legislatura suscrito entre nacionalistas vascos y socialistas suponga la exclusión explícita de la negociación política con ETA, es el único punto de coincidencia expuesto por los grupos de la oposición parlamentaria vasca -Coalición Popular y Euskadiko Ezkerra- en relación al discurso de José Antonio Ardanza. El hecho de que el candidato a lendakari se haya presentado ante el Parlamento con la consecución de un pacto de legislatura, ha provocado una división en la oposición vasca que, con la lógica excepción del grupo socialista, mantenía su reservas frente a la eficacia del acuerdo.La intervención emocionada del portavoz del grupo nacionalista, José Ángel Cuerda, que dijo de Garaikoetxea: "no es un hombre de pasado, sino de futuro", provocó el consiguiente malestar en la dirección del PNV. Ello dio pie a los representantes de Euskadiko Ezkerra y Coalición Popular para que, en los pasillos del Parlamento, abundaran en su escepticismo frente a la solidez del pacto de legislatura, ya que, según ellos mismos dijeron, Ios nacionalistas continúan divididos".

Euskadiko Ezkerra fue la formación política que se mostró más crítica con el contenido del mencionado acuerdo. Su secretario general, Mario Onaindía, no ocultó su actitud escéptica frente a la efectividad de los mencionados acuerdos. Así, tras recordar que la exclusión de la negociación con ETA fue un término acuñado en el documento elaborado hace dos meses en Madrid y aceptado por Coalición Popular, socialistas y el senador nacionalista Joseba Elóseguí, a título personal, Onaindía se preguntaba "qué había cambiado en los dos últimos meses" para aceptar esa frase. Por otra parte, el portavoz de Euskadiko Ezkerra, que opinó que el discurso de José Antonio Ardanza carecía de precisiones programáticas, dijo que los protagonistas del pacto han defendido esencialmente una concepción foralista de la estructuración interna de la comunidad autónoma vasca. "Nos parece peligroso para la democracia", comentó Onaindía, "que exijan acuerdos en todo porque, en esos casos, la democracia se devalúa".

Coalición Popular, por su parte, hizo un llamamiento a nacionalistas y socialistas para recordarles, acaso porque estaban ofreciendo una imagen excesivamente optimista que no concordaba con la realidad política del País Vasco, los retos que debían afrontar en los próximos años. Jaime Mayor Oreja, en este sentido, le recordó a José Antonio Ardanza la urgente necesidad de recuperar el prestigio de las instituciones vascas que tan afectadas se han visto a raíz de los conflictos internos del PNV. El portavoz del Grupo Popular manifestó sus reservas ante el acuerdo no sólo porque estuviera suscrito por el futuro Gobierno vasco y el grupo socialista, sino porque la relación entre las dos principales fuerzas del País Vasco se ha caracterizado por el seguimiento de una línea incoherente. "La relación entre nacionalistas y socialistas desde el comienzo de la democracia ha batido todos los récord de oscilaciones".