El Gobierno reajustará los precios de las gasolinas al introducir dos nuevos octanajes con reducción de plomo

El Gobierno tiene previsto publicar en los próximos días un decreto estableciendo dos nuevos tipos de gasolina con mayor octanaje e inferior contenido de plomo que, según fuentes solventes, forzará a un reajuste al alza en los precios de los carburantes que no se han visto afectados por la última subida de los productos derivados del petróleo. Los nuevos octanajes serán de 97 para la súper y 92 para la normal, que durante un período transitorio de cuatro meses coexistirán en el mercado con los anteriores (90, normal; 96, súper, y 98, extra).

Aunque el Gobierno no ha perfilado aún el aumento en el precio de las gasolinas que forzará este cambio, fuentes solventes indican que no será muy elevado y oscilará entre las dos-tres pesetas por litro, que se han visto aplazadas en el último Consejo de Ministros, celebrado el pasado miércoles bajo la presidencia de Felipe González.El Ministerio de Industria y Energía está inmerso, desde el pasado diciembre, en una serie de conversaciones técnicas de negociación complicada con las refinerías para proceder a este cambio en las características técnicas de las gasolinas y para, simultáneamente, ultimar una importante modificación en el denominado sistema de precios ex refinería; esto es, el mecanismo por el que Campsa liquida a las empresas refinadoras sus entregas de productos para su distribución y comercialización.

El cambio en el actual sistema de octanajes es consecuencia del compromiso del Gobierno para adaptar el consumo de este pro ducto a la normativa comunitaria respecto al bajo contenido de plomo de las gasolinas. La reducción del contenido de plomo lleva implícita la necesidad de mejorar el octanaje, o calidad de la gasolina, para reducir el grado de contaminación atmosférica que produce la combustión del carburante. Para las refinerías, el cambio supondrá un sobrecoste al verse modificado el proceso de refino.

Pese a que la Junta Superior de Precios propuso al Consejo de Ministros una subida de dos pesetas en el precio de las gasolinas, precisamente para financiar este sobrecoste de refino, el Gobierno decidió aplazar el incremento propuesto hasta que las gasolinas, con los nuevos octanajes, se encuentren disponibles en el mercado.

Fuentes consultadas apuntan que el decreto que obliga a Campsa a la venta de los nuevos productos será publicado esta semana próxima, aunque llevará un período transitorio para su cumplimiento de unos cuatro meses. En este sentido, el nuevo precio de las gasolinas se establecerá de forma automática -previsiblemente será necesaria una consulta a la Junta Superior de Precios- cuando los nuevos productos estén a la venta.

Nuevos precios de refinería

Esta semana, por otro lado, está previsto que continúen las negociaciones, iniciadas el pasado diciembre, entre el Ministerio de Industria y representantes de las refinerías para ultimar la nueva fórmula de liquidación de Campsa a las empresas. Los nuevos precios ex refinería incluyen, además, un programa de saneamiento para el sector refino, que se caracteriza, fundamentalmente, por establecer el destino de un porcentaje en la facturación del sector a saneamiento o amortización de las fuertes inversiones realizadas en la reconversión catalítica de las instalaciones.Asimismo, el nuevo sistema llevará parejo un proceso de ajuste de las capacidades nominales de refino a la realidad, de forma que no se utilice aquella constante para argumentar cuotas de mercado. La intención gubernamental es proponer acuerdos de compra en crudos, cantidades de refino y mercado que establezcan una estructura productiva equilibrada entre las seis empresas del sector. Un problema adicional será determinar el futuro de la refinería que Explosivos Río Tinto (ERT) tiene en Huelva, habida cuenta de que tendrá que ser integrada, al menos en su estructura productiva, en otras empresas del sector, con el fin de reducir costes de producción y, sobre todo, para resolver el problema que se planteará por la imposibilidad de ERT para asumir el compromiso financiero que lleva implícita la constitución de la nueva Campsa.

El nuevo sistema de precios ex refinería introduce, en uno de los aspectos quizá más interesante de la fórmula, un tipo de indización de los costes en las compras de crudo al mercado libre de Rotterdam. Con ello se primará a las empresas que compren, dentro de la parte que corresponde a cuota libre, el crudo más barato, y penalizará a aquellas que tengan una política de abastecimiento no apropiada con la realidad del mercado.

Según fuentes solventes, la nueva fórmula, negociada bajo la batuta de Nemesio Fernández Cuesta, subdirector general de Petróleo, del Ministerio de Industria, ha sido bien acogida por los representantes de los refineros, habida cuenta de la agilización que supondrá para el sistema de pagos de Campsa a las empresas por la entrega de sus productos.