Condenado el teniente del Ejército que abofeteó a un joven en un pueblo de Cáceres

El teniente Juan Antonio Gómez Martínez, perteneciente a la segunda compañía del regimiento acorazado motorizable VADRAS número 55, con sede en Madrid, ha sido condenado por un juez del distrito de Navalmoral de la Mata (Cáceres) a la pena de cinco días de arresto menor, multa de 2.000 pesetas e indemnización de 4.000 pesetas por "el dolor injustamente causado" a un joven de la localidad de de Calayuela.

Según la sentencia del juez Salvador Ortiz García, el teniente Juan Antonio Gómez es culpable de la agresión sufrida por el joven Sebastián Leal, quien en la noche del 22 de septiembre de 1983 fue abofeteado por el citado militar a la entrada de una discoteca de Calayuela, localidad cacereña en la que la compañía del regimiento VAD-RAS había realizado ejercicios de prácticas durante una semana.

Una veintena de personas pudieron comprobar en aquella fecha cómo Sebastián Leal y Luis Miguel Gómez, residentes en el pueblo, sufrieron agresiones por parte de algunos oficiales y suboficiales de la citada unidad, ofendidos, al parecer, por el consumo de porros que un grupo de jóvenes efectuaba en la entrada.

La sentencia culpa al teniente de golpear "reiteradamente con la mano en la cara de Sebastián Leal, causándole lesiones leves" y absuelve el sargento Manuel González, igualmente denunciado por agresión, al mismo tiempo que califica de desconocido al autor de las agresiones contra el segundo de los jóvenes.