Un pescador muerto en La Coruña, primera víctima de un nuevo ciclón que se extiende por el norte de España
El pescador Ángel Lestón Formoso, de 48 años, de Muros (La Coruña), murió ahogado a primera hora de la tarde de ayer al volear la embarcación en la que faenaba por efecto del fuerte temporal provocado por los restos del ciclón Klaus. Otro pescador que acompañaba al fallecido, Antonio Domingo Lago, de 17 años, vecino también de Muros, consiguió ponerse a salvo tras nadar hasta la costa. Ángel Lestón era patrón y propietario de la embarcación Barito, y se disponía a retirar las artes de pesca, a la altura de Tal, cerca de Muros, cuando fuertes ráfagas de viento causaron el accidente. El cuerpo del pescador fue rescatado horas más tarde.
Por segunda vez en poco más de un mes, y cuando aún no existe una evaluación definitiva de los daños producidos el pasado 4 de octubre, Galicia hace frente a la contingencia de un ciclón ya debilitado procedente del Caribe, esta vez acompañado de un fuerte aparato de lluvias. También Asturias, Cantabria y algunas zonas del norte de León han sido alertadas del peligro. El Klaus, que se presenta también con retraso respecto, a los primeros pronósticos, promete menos intensidad que su predecesor.Se aventuran rachas de viento superiores a los 120 kilómetros hora, por lo que se han puesto en marcha todos los mecanismos de alerta.
Según los servicios meteorológicos, que siguen palmo a palmo la travesía oceánica de la profunda borrasca, la tipología del Klaus es menos virulenta que la del anterior azote. Por esta circunstancia, y para evitar alarmas desproporcionadas, el anuncio y los preparativos para hacer frente al mismo se han llevado esta vez con extrema, da cautela.
Según los últimos avances, el Klaus retardaba su llegada, prevista para el mediodía de ayer, y, en opinión de los expertos, tendrá menor velocidad que el Hortensia, pero dejará sentir sus efectos más tiempo, previsiblemente hasta el final de semana.
Conforme a las previsiones, el Klaus hará sus incursiones más peligrosas en la zona norte de Galicia, ampliará su radio de actuación hasta la parte más occidental de Castilla y León y se extenderá por la cornisa cantábrica. En previsión de cualquier emergencia, tanto los órganos de la Administración central como la Xunta han puesto en marcha los dispositivos de protección. La Consellería de Educación, que anduvo desorientada con el Hortensia, comunicó oficialmente la suspensión de clases en todos los centros de enseñanza de la comunidad autónoma. Ante la amenaza de mar arbolada, se han tomado especiales precauciones en la costa y puertos pesqueros, ordenándose el amarre de, la flota.
Con la memoria fresca del susto del Hortensia, que causó pérdidas que en total pueden sobrepasar los 10.000 millones de pesetas, la población gallega ha acogido con perplejidad y cierto desenfado, 42 días después, el fenómeno reincidente de un huracán que viene a morir, como algunas ballenas, al viejo mundo. "El Klaus dejó de ser ciclón hace 40 horas", explicaba. ayer por la mañana Rodolfo García, director del Centro Meteorológico Zonal de La Coruña, "pero se alimenta dé aire más frío y se reactiva".
"Pues sí", confirma el director del centro en su lenguaje de experto, "este año hay mucha zonalidad de los oestes". Con tanta agitación, los gallegos se han vuelto entendidos en el misterio de la meteorología. El Hortensia fue tema cotidiano de conversación en la calle durante muchos días, y el Klaus volvió a ser ayer la estrella invitada en todos los programas radiofánicos locales, incluso con participación de oyentes. Esta vez no ha habido psicosis. La gente sintoniza el transistor y comenta el curso de los vientos. Se habla del Caribe como si fuera una vecindad. Algunas casas comerciales se han apresurado a anunciar aparatos útiles para estos casos, como motosierras y autogeneradores.
"Coidado, que éste é home" (cuidado, que éste es hombre), dice una vendedora en el mercado de San Agustín, apremiando a las clientas. La naturaleza del sexo de los ciclones es el tema preferido en la abundante chismografía que circula. De confirmar su menor agresividad, el Klaus abundará en el prestigio popular de los ciclones femeninos.
Los organismos oficiales parecen haberse adelantado al clima social en materia de ciclones atenuados, ajustándose a la realidad gallega en las recomendaciones. Con el Hortensia no figuraba, por ejemplo, ninguna mención a la precaución marítima, porque las normas leídas eran tales como llegaron de Madrid. Ahora, la primera recomendación fue no salir a la mar. Y no se difunden otras que entonces pusieron los pelos de punta a medio país, como la de, en zona urbana, refúgiese en los edificios más resistentes.
Aviso a la flota
El anuncio de la llegada del Klaus, -informa Ernesto S.Pombo- prevista en Lugo para primeras horas de la noche, puso en marcha el dispositivo de Protección Civil de la provincia, que permanece en contacto constante con ayuntamientos, fuerzas de seguridad, Cruz Roja, radioaficionados y centros hospitalarios por si llegase a ser necesaria su colaboración. También como la vez anterior, los centros escolares lucenses fueron cerrados a mediodía, y sus actividades se espera que se reanuden hoy.
Entre las recomendaciones difundidas cabe destacar las de las cofradías de pescadores, juntas de puertos y comandancias de Marina, que han recomendado el regreso a puerto de los barcos que se hallaban faenando y el reforzamiento de las amarras de los que no se hicieron a la mar. De igual forma se ha recomendado reforzar las estructuras de las construcciones agrícolas y ganaderas de la zona rural, la más afectada anteriormente por el Hortensia.
Alerta en Asturias
El anuncio de los posibles efectos residuales del ciclón Klaus fue comunicado a la población asturiana a mediodía de ayer, a través de una nota hecha pública por la dirección provincial de Protección Civil, informa Miguel Sovilla.
No obstante, el servicio de Protección Civil advertía que los datos disponibles hasta ayer hacían suponer que los efectos de esta borrasca "serán notablemente inferiores a los registrados con motivo del denominado ciclón Hortensia", que azotó el noroeste peninsular el pasado mes de octubre y que en Asturias produjo cinco muertes, y considerables daños materiales.
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