El liberalismo demócrata
Walter Mondale apoya, en política exterior, una congelación de armas nucleares, mutua y verificable, que sirva como primer paso para reanudar las conversaciones sobre limitación y control de armas atómicas. Propone institucionalizar contactos periódicos entre los dirigentes de Estados Unidos y la Unión Soviética. Aboga por un aplazamiento en la decisión de militarizar el espacio con la fabricación de satélites antimisiles y considera válidas las conversaciones para la limitación de armas estratégicas (SALT II) -negociado y firmado en época de la Administración Carter-Mondale-, que se encuentra pendiente de ratificación por parte del Senado de EE UU. El candidato demócrata critica a Ronald Reagan por haber rechazado un diálogo con los soviéticos.En Centroamérica hay, quizá, una mayor diferencia entre las políticas de Reagan y Mondale. En tanto que éste defiende una retirada total de los consejeros militares estadounidenses estacionados en Honduras y El Salvador, junto con el cese del apoyo de la CIA a las operaciones encubiertas contra los sandinistas, Reagan, sin embargo, es partidario de un eventual boicoteo de los accesos marítimos a Nicaragua para forzar al régimen sandinista a negociar. Mondale apoya también la propuesta de paz del Grupo de Contadora.
El aspirante de Minnesota critica duramente el fracaso de la política de Reagan en Líbano y, sobre todo, la falta de previsión para contener el último atentado contra las instalaciones diplomáticas de EE UU en Beirut. Considera que la política de Reagan en Oriente Próximo es un "desastre completo". Defiende la continuidad de los acuerdos de Camp David -negociados durante la Administración Carter-Mondale- y, en general, apoya las tesis israelíes.
La posición demócrata en política de defensa es más moderada. Mondale preconiza recortes en ciertos capítulos del gasto militar, pero es partidario de continuar el incremento entre el 3% y 4% anual por encima de la inflación. En capítulos específicos, es partidario de cancelar el programa de misiles MX y del superbombardero B-1, pero acepta la continuidad del programa de submarinos Trident y del incremento del número de barcos para la Armada.
Reducir el déficit
En política interior, Mondale denuncia vivamente la continuidad y el aumento del déficit público. Considera inevitable la subida de los impuestos -como medida para corregir el déficit- para aquellas familias con ingresos superiores a los 25.000 dólares anuales. Deflende la continuidad de ayudas para la asistencia médica, los bonos para comidas y no acepta reducciones para los beneficiarios de la Seguridad Social.
El ex vicepresidente de James Carter se muestra partidario de la actual legislación que autoriza el aborto y se opone a toda enmienda constitucional que convierta en obligatoria la plegaria en las escuelas. Se propone luchar sin tregua contra los traficantes de droga.
