Andreotti salvo anoche en el Senado italiano tres mociones de dimisión

Giulio Andreotti, ministro italiano de Asuntos Exteriores, salvó fácilmente anoche, en el Senado, tres mociones de dimisión presentadas por los grupos comunista, fascista, e izquierda independiente. Los tres grupos le acusaban de connivencia con el banquero mafioso Michele Sindona. De las tres mociones, la comunista fue la más reñida, ya que no pasó por 79 votos: 177 en contra y 98 a favor, de un censo de 322 senadores.

El Partido Comunista Italiano (PCI) nunca había sido tan duro con la Democracia Cristiana como ayer, cuando Enmanuele Macaluso, senador y director de L'Unità, órgano del partido, presentó, ante un Senado abarrotado, la moción contra Giulio Andreotti, a quien se pide que dimita como ministro de Asuntos Exteriores por haber defendido al banquero siciliano Michele Sindona, acusado de bancarrota, cuando ya era buscado por la policía y la magistratura.La intervención de Macaluso duró una hora exacta y fue seguida con un gran silencio por un auditorio en el que se hacía notar la ausencia de Andreotti. El dirigente comunista manifestó que Andreotti "es hoy el hombre más eminente, por historia y por estatura, de la Democracia Cristiana", y añadió que si no dejara el Gobierno para permitir aclarar tantas cosas oscuras sería un atentado contra la misma democracia.

Macaluso no se limitó a acusar sólo a Andreotti por el caso Sindona. También recordó que sus hombres en Sicilia están implicados con la Mafia. Tampoco se limitó a atacar sólo a Andreotti. Arremetió también contra el ex presidente del Gobierno Amintore Fanfani, al que acusó de haber recibido en su tiempo 200 millones de pesetas de Sindona para financiar la campaña del referéndum contra la ley del aborto aprobada por el Parlamento.

El primer ministro, el socialista Bettino Craxi, intervino ante los senadores para defender a su ministro de Exteriores, a quien, dijo, considera inocente de las acusaciones que se le hacen, que, en su opinión, no tienen ninguna base.

El ministro se defiende

Andreotti, por primera vez en su vida, aceptó ayer una entrevista en la que responde a todas las acusaciones que se le hacen. Se la hizo Indro Montanelli, director del diario conservador Il Giornale, de Milán.El político que un día dijo que "el poder desgasta sólo a quien no lo tiene", afirma ahora que eso es cierto sólo a medias, ya que una presencia como la suya en el poder, "siete años de subsecretario, 17 de ministro y cinco como presidente del Gobierno" no se puede mantener "sin suscitar voces".

Giulio Andreotti niega todas las acusaciones sobre su relación con Sindona, y cuando Montanelli le indica que la gente quiere saber qué se esconde detrás de la historia de un Andreotti acusado de todo -hasta de ser el verdadero jefe y cerebro de la logia Propaganda 2, de Licio Gelli, y el gran viejo que ha movido invisiblemente los hilos de la subversión terrorista-, Andreotti, con el humor que le caracteriza, responde: "Me surge una duda: ¿no estará detrás, como siempre, Andreotti?".

Se iba a votar también una moción presentada por el Gobierno. Es una moción ambigua e indirectamente dirigida contra Andreotti, aunque no le nombra. En ella los cinco partidos de la mayoría del Gobierno (democristiano, socialista, republicano, socialdemócrata y liberal) se comprometen a que el Senado continúe investigando sobre el caso Sindona.