Un pesquero español huye de un puerto portugués, donde estaba detenido desde el 8 de septiembre
El pesquero con base en Isla Cristina (Huelva) Marisco Moguer XXI, escapó en la madrugada de ayer del puerto portugués de Faro, donde se hallaba retenido desde el pasado 8 de septiembre, multado con 7.700.000 pesetas, la sanción más cuantiosa impuesta hasta ahora por el Gobierno portugués a un buque de pesca. El Marisco Moguer XXI llegó a la citada localidad onubense a las ocho de la mañana de ayer, donde fue recibido por un nutrido grupo de personas entre vítores y aplausos.
El buque, de 27 toneladas y con cinco tripulantes a bordo, fue apresado por una patrullera portuguesa cuando se encontraba capturando marisco al arrastre en aguas jurisdiccionales españolas, según el armador y patrón, José Vázquez Martín. Las autoridades del país vecino afirman que estaba a ocho millas de la costa portuguesa al sur de Montegordo, según las autoridades del país vecino. Además la alta multa se le impuso por resistencia a la autoridad y uso de mallas no permitidas.El pesquero se mantuvo varias horas anclado en el mar a la espera de la llegada de una patrullera española que confirmara la posición, lo cual no se produjo, entre otras cosas porque, según el ayudante de Marina de Isla Cristina, José Ramallo, no hay ninguna utilizable en la zona. Fue remolcado hasta Faro y varado a dos kilómetros del puerto. El patrón quedó solo en el barco y el resto de la tripulación regresó a Huelva. Allí José Vázquez Martín hubo de recibir comida de su mujer y su hija, que le acompañaron durante 19 días viviendo en el propio barco. En la fuga de ayer el patrón fue auxiliado por su yerno, Manuel Barba.
Posteriormente, el buque fue conducido junto a otros dos pesqueros españoles apresados, el Marquesa de Tilde, con base en Ayamonte, y el Pomares, con base en Isla Cristina, y custodiados todos ellos por una patrullera. Fue en esta situación cuando a las cuatro de la madrugada de ayer el Marisco Moguer XXI inició el regreso a su puerto aprovechando, según el armador, un descuido del soldado vigilante. Al barco le quedaban 10 días para hacer efectiva la multa y en repetidas ocasiones José Vázquez había dicho que no tenía posibilidades económicas para pagarla. De hecho, el buque, prácticamente nuevo, estaba recién terminado de pagar y su valor total es inferior al de la multa.
Una vez en Isla Cristina la Ayudantía de Marina fue informada de la situación y, en principio, se espera una respuesta de las autoridades portuguesas para tomar una determinación. No obstante, la Asociación de Armadores de Buques de Isla Cristina piensa utilizar, entre otros, el argumento de que el pasado 20 de febrero un pesquero portugués apresado y multado en Isla Cristina con un millón de pesetas, el Alga, se escapó hacia su puerto base, sin que se tomara ninguna medida contra él. El patrón del Marisco Moguer XXI señaló ayer en unas cortas declaraciones a los periodistas que pensaba cambiar el nombre al barco y seguir faenando.
España y Portugal carecen de acuerdo pesquero válido desde el 31 de diciembre de 1982, fecha en que expiró el firmado en 1969. Desde entonces, cerca de 75 barcos con base en Ayamonte, Isla Cristina y Lepe, y esporádicamente algunos más de Punta Umbría y el Puerto de Santa María (Cádiz) faenan sin cobertura legal.
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