La bolsa decidió la semana a efectuar limpieza general
La bolsa ha sufrido esta semana fuertes presiones vendedoras que han llevado a la baja los índices sectoriales. La aparición de las realizaciones de beneficios después de las ganancias de tandas anteriores, especialmente en eléctricas y bancos, estaban cantadas y sólo hacía falta saber cuándo llegarían.Quizá el día elegido para las ventas haya sido el único elemento de sorpresa para muchos operadores, ya que coincidió con la firma del Acuerdo Económico y Social, un acontecimiento que debería haber servido para tirar del mercado hacia arriba. Las explicaciones son siempre fáciles después. Y ahora es fácil analizar que el retraso en la firma del pacto social impulsó a los operadores a ir descontando el efecto beneficioso día tras día.
Las ventas se enseñorearon del parqué, pero la resistencia del dinero a permitir descensos prolongados ha sido evidente. Los volúmenes de contratación no han descendido por debajo de los 2.000 millones de pesetas diarios y las compras a crédito también se han mantenido en unos niveles tan altos que han comenzado a causar cierta sensación de inseguridad entre algunos analistas.
Las causas de esta aparente contradicción tienen su origen en las noticias positivas que se han sabido a lo largo de esta corta semana. Por una parte, la presentación del proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado, cuyo objetivo de contener el gasto público y proseguir con la moderación salarial debe permitir a las empresas el incremento de unos beneficios que actualmente ya están consolidándose.
Por otra parte, la primicia informativa sobre el futuro tratamiento fiscal de las plusvalías y minusvalías causó bastante temor entre los inversores, que necesitaron analizar la noticia y valorar la repercusión de los cambios introducidos por el Gobierno. No se puede decir que el balance haya gustado, pero en todo caso no debe ser un motivo de desánimo para el mercado de renta variable.Además, la Compañía Telefónica comenzó el jueves su ampliación de capital, lo que siempre sirve para incentivar la llegada de dinero a la bolsa.A juicio de los analistas, el duro castigo sufrido por la bolsa en esta semana ha permitido el saneamiento del mercado, al que se le considera sobrecomprado, y sólo lamentan que los descensos no hayan sido aún más fuertes pilla permitir una limpieza a fondo.
Las posiciones de dinero a cambios más baratos, por otra parte, indican el deseo de entrar en el juego en cuanto las cotizaciones flexionan a la baja, lo que debe impedir que los valores registren retrocesos importantes. Casi nadie descarta la posibilidad de que cambie la tendencia ya en las primeras jornadas de la próxima tanda semanal.
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