Felipe González afirma que la última palabra sobre la Alianza Atlántica la tiene el Gobierno, al margen del PSOE

El Gobierno español tiene una responsabilidad nacional que trasciende los límites del Partido Socialista, por lo que será el Gabinete, y su presidente, el que diga su palabra final sobre la permanencia de España en la OTAN, afirmó ayer tarde Felipe González, durante la conferencia de prensa que ofreció al final de la visita del jefe, del Estado angoleño, José Eduardo dos Santos. Igualmente, el presidente del Gobierno español afirmó que el PSOE no se pronunciará hasta después del Congreso y se negó a aclarar cuándo lo hará el Gobierno.Al preguntarle sobre las recientes declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores, Fernando Morán, en contra de la permanencia de España en el Comité Militar de la OTAN, González, mirando a Morán, que se encontraba a su lado, respondió que este tema no ha sido discutido todavía por el Gobierno y que el jefe de la diplomacia española sabe que la postura española al respecto es favorable al mantenimiento de la situación que existía en el momento de llegar el PSOE al Gobierno, esto es, permanencia en la OTAN con una integración limitada en la estructura militar.

El debate interno en el PSOE "no va a crear problemas en el Gobierno español", dijo González. "En el Partido Socialista existen diversas posiciones y, por tanto, discrepancias" en torno a este asunto, añadió. Según el presidente del Gobierno español, las raíces del debate se encuentran en el congreso del PSOE de 1981, cuando el partido aceptó que España formaba parte del mundo occidental y, por tanto, aceptó su cuota de responsabilidad en la seguridad colectiva de Occidente.

A partir de esta definición de principios, el presidente del Gobierno español dijo que existían dos posibilidades: volver a la situación existente hasta mayo de 1982, cuando se firmó la adhesión a la Alianza Atlántica, o mantener la situación creada a partir de entonces. Dado que la firma de la adhesión a la Alianza es posterior al congreso del PSOE de 1981, es previsible que en el próximo, que se celebrará en diciembre, exista una posición mayoritaria y otra minoritaria al respecto, añadió González.

"La espera no será larga"

Mientras no resuelva el congreso, agregó Felipe González, no habrá una toma de posición del PSOE sobre la pertenencia de España a la OTAN. El presidente del Gobierno español no respondió a la pregunta sobre cuándo se pronunciará su Gabinete sobre el asunto, si antes o después del congreso, aunque, sonriendo, afirmó que "la espera no será larga".

Sugiriendo abiertamente que la postura del Gobierno no tiene forzosamente que coincidir con la del PSOE, Felipe González dijo que el pronunciamiento del partido sobre la OTAN deberá ser un "pronunciamiento democrático", aunque éste sólo afecta al Gobierno "en la medida en que es un Gobierno que tiene el apoyo del partido socialista, pero el Gobierno de la Nación, además", recalcó, "tiene una responsabilidad nacional que trasciende las fronteras del propio partido, y, por consiguiente, tiene su palabra que decir, y desde luego su presidente lo dirá, en la defensa de lo que creo son los legítimos intereses nacionales".

Preguntado por EL PAIS sobre si el Gobierno compartía lo dicho por Morán esta semana en la revista Tiempo sobre la necesidad de abandonar el Comité Militar de la OTAN, Felipe González afirmó que "el Gobierno no ha discutido ese tema hasta ahora, como sabe el ministro Morán".