Insalud investiga la muerte de un niño que fue intenervenido en el Primero de Octubre

El Insalud anunció ayer que ha abierto una investigación sobre la muerte del niño José Antonio Díaz Canal, de 10 años, en el hospital Primero de Octubre el jueves, donde había ingresado para que se le extrajera del oído una espiga. El padre del niño denunció el hecho como un caso de negligencia, mientras que la dirección del centró informó ayer que "no se ha detectado indicio alguno de mala práctica médica".

Alteraciones neurológicas e hipertermia han sido las causas del fallecimiento del niño de 10 años de edad José Antonio Díaz Canal, según explicó la dirección del hospital Primero de Octubre, de Madrid, donde había ingresado el miércoles por su propio pie para que le fuera retirada del pabellón auditivo una espiga. El padre declaró a un periódico madrileño que, en un parte médico que él recibió, la causa de la muerte se atribuía a un paro cardiaco, y denuncia la existencia de supuestas negligencias. Sin embargo, el forense que lleva el caso explicó "que del primer resultado de la autopsia no cabe sospechar que haya nada que pueda inducir a pensar que se hayan producido hechos culposos".El miércoles pasado, José Antonio estaba jugando en, un descampado frente al domicilio familiar, en Valdemoro (Madrid), cuando se le introdujo en el oído una espiga. Como le resultaba molesta, una hermana lo llevó al médico del pueblo y, posteriormente, a un especialista, quien aconsejó que fuera trasladado al hospital Primero de Octubre, dada la dificultad para extraerle .el cuerpo extraño del oído, según informó ayer un diario de Madrid

El niño ingresó pasadas las 16.30 horas en el centro hospitalario, donde se le intervino con anestesia local. Ante la imposibilidad de extraerle el cuerpo extraño, se le intervino con anestesia total a las nueve de la noche. Según un parte médico proporcionado por el hospital Primero de Octubre, el niño salió de la operación con hipertermia -subida de temperatura- y alteraciones neurológicas, por lo que fue trasladado a la unidad de cuidados intensivos (UCI) pediátrica, donde falleció en la madrugada del jueves. La familia cree que la muerte de José Antonio Díaz, enterrado ayer, se produjo por negligencia de los médicos.

Mariano Royo, forense que ha practicado la autopsia del cadáver del niño, manifestó que "aparentemente no hay nada extraño en el caso, aunque la autopsia de oído es extremadamente difícil, porque se hacen muy pocas al cabo del año. Lo que parece es que la causa inmediata de la muerte fue un paro cardiaco, y las remotas, la hipertermia y las alteraciones neurológicas".

En el mencionado parte médico del hospital Primero de Octubre, al referirse al tratamiento recibido por el niño fallecido, se precisa que "no se ha detectado indicio alguno de mala práctica médica".

Un portavoz del Instituto Nacional de la Salud (Insalud) manifestó ayer que se ha ordenado la apertura de una investigación sobre la muerte de José Antonio Díaz. La misma fuente indicó que mientras el forense no presente un informe definitivo de la autopsia, se da por válida la versión proporcionada por la dirección del hospital.