Las finanzas de la Seguridad Social no permiten la jubilación a los 64 años, según Almunia

El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Joaquín Almunia, señaló ayer al final de la tercera jornada de negociación del Acuerdo Económico y Social (AES) que hoy por hoy, la situación financiera de la Seguridad Social hace inviable la reducción de la jubilación a los 64 años, como se planteaba en el programa electoral del PSOE. Llevar a cabo esa medida tendría un coste, según el ministro, superior a los 50.000 millones de pesetas.

En la sesión de ayer, dedicada esencialmente a estudiar las medidas de flexibilización del mercado de trabajo y los posibles conciertos del Instituto Nacional de Empleo (Inem) con las corporaciones locales y comunidades autónomas, se pusieron de manifiesto de nuevo las cada vez mayores diferencias que separan a CC OO del resto de los interlocutores presentes en la mesa de negociación.En la reunión que se celebrará el próximo jueves, el Gobierno dará a conocer la oferta pública de empleo que servirá de pauta para la negociación. En la sesión de ayer el secretario de Estado de Economía y Planificación, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, afirmó que esta misma semana el Ejecutivo habrá elaborado su estimación del nivel que alcanzará a final de año los precios al consumo.

Fernández Ordóñez expuso las causas que habían motivado el incremento del 1,5% en la inflación en julio y anticipó que el Gobierno va a tomar medidas para acabar con la situación de cuasi oligopolio en la que se encuentra la venta de carne de pollo, uno de los factores que han contribuido a esta subida.

Contratación temporal

Dentro de los temas que se abordaron en ayer, Comisiones sigue alejada de las posturas de los demás interlocutores. Favorable a la creación de 50.000 empleos en la Administración central de manera inmediata y 180.000 en los ayuntamientos, CC OO considera que la contratación temporal está descendiendo en los últimos meses, y que esta fórmula apenas si crea empleo. Asimismo, sigue manteniendo su reinvindicación de jubilación a los 64 años y el acortamiento de la semana laboral a 38 horas. Los representantes de CC OO pidieron una cuantificación del empleo que se creará en el sector privado, que se cubran los 56.000 puestos de trabajo vacantes en la Administración y que la duración de los contratos en prácticas no sea superior a un año.UGT, por su parte, solicitó que se ampliara a 30.000 millones la cantidad destinada a fomentar la creación de empleo entre el Inem y otros organismos, lo que posibilitaría 200.000 nuevos puestos de trabajo, y que se concedan exenciones en la tributación a la seguridad social para los contratos en prácticas y formación, así como bonificaciones para la contratación de desempleados de edades entre 29 y 45 años.

La central socialista, que pidió mayor colaboración entre el Inem y los sindicatos para poder controlar las posibles arbitrariedades en la contratación, mostró su divergencia en este punto con la CEOE, cuyos representantes pidieron que la extinción del contrato de trabajo fuera patrimonio exclusivo de los empresarios. "Esto sería una legalización del derecho de pernada", subrayó José María Zufiaur. En cambio, UGT y CEOE coincidieron en que las horas extraordinarias se compensaran mediante tiempo libre. La reducción de la jornada laboral a 38 horas tendría que llevarse a cabo en dos años, a juicio de UGT, cuyos representantes matizaron que el objetivo de jubilación a los 64 años no tiene que realizarse con dinero público.

La CEOE se opone frontalmente a la creación de más funcionarios -"el país que crea funcionarios recoge impuestos", afirmó gráficamente Juan Jiménez Aguilar, secretario general de CEOE-, negativa a la reducción de la jornada laboral, que haría perder competitividad a las empresas, y oposición a la jubilación a los 64 años, así como a la propuesta de cuantificación de empleos en el sector privado pedida por CC OO. Si se persiste en mantener estas peticiones el acuerdo será difícil, afirmó Jiménez Aguilar.