El nuevo reglamento municipal de vertidos industriales autoriza multas de hasta 100 millones

El reglamento de vertidos no domésticos, que permite la aplicación de multas de hasta 100 millones de pesetas a las empresas que infrinjan las normas, fue aprobado ayer por unanimidad de los tres grupos con representación municipal en la última sesión plenaria ordinaria del Ayuntamiento de Madrid antes del período de descanso anual. La nueva normativa hará posible también que el ayuntamiento obligue a determinadas industrias a instalar aparatos de control de la cantidad y naturaleza de los residuos que vierten al alcantarillado (ver EL PAIS del 22 de julio).

Aunque la sesión de ayer era la última ordinaria, la comisión permanente había aprobado a primera hora de la mañana una propuesta para retrasar hasta el 10 de agosto el pleno extraordinario sobre el presupuesto de inversiones, por lo que los corporativos tendrán que suspender sus vacaciones de verano. El retraso de esta sesión extrordinaria, prevista en principio para el próximo lunes, se debe a las objecciones del Grupo Popular a la documentación adjunta al proyecto de presupuesto de inversiones.El socialista Jesús Espelosín, concejal encargado del área de Urbanismo e Infraestructuras, defendió la aprobación del reglamento de vertidos y afirmó que servirá "para regular la naturaleza de las aguas residuales procedentes de las instalaciones industriales ubicadas en el termino municipal de Madrid". El nuevo reglamento, explicó Espelosín, va dirigido fundamentalmente a la protección de la red de alcantarillado y de las estaciones depuradoras y es un complemento del Plan de Saneamiento Integral, cuyas obras están a punto de finalizar.

Emilio García Horcajo, concejal de Seguridad y Circulación, defendió el nuevo reglamento para el Cuerpo de Bomberos, del que dijo que ha sido elaborado con la colaboración de los mandos y de los representantes sindicales. Este reglamento también fue aprobado por unanimidad.

La resolución del recurso de reposición interpuesto por la Real Sociedad Hípica Española Club de Campo contra el acuerdo del pleno celebrado el 29 de junio pasado, por el que se declaró desierto el concurso para constituir una empresa mixta y se proponía el desalojo de los miembros del Club de las instalaciones, así como la aprobación del convenio firmado por el alcalde con dicha entidad, fue aprobado con el voto en contra de la oposición. El Grupo Popular también votó en contra del balance y cuenta de resultados de la Empresa Municipal de Transportes presentado por el equipo de gobierno. El balance arroja pérdidas de 3.314 millones de pesetas durante el ejercicio de 1983, frente a los 3.991 millones presupuestados. La negativa del Grupo Popular no desanimó al concejal encargado del área de Hacienda y Economía, Alfredo Tejero, que aseguró que "la EMT funciona cada vez mejor, y espero que el próximo ejercicio sea aún más esperanzador".

La renuncia al cargo del segundo teniente de alcalde y concejal del PSOE, Javier Angelina, que fue presentada de forma oficial al pleno, provocó una larga lista de intervenciones emotivas de los portavoces de los tres grupos que componen la corporación. Por el Grupo Popular, José María Álvarez del Manzano calificó al concejal saliente como "un señor", y Alberto Ruiz Gallardón aseguró que sólo le encuentra a Angelina un defecto, "trabajar para el PSOE".

La celebración del penúltimo pleno antes de las vacaciones veraniegas de los concejales estuvo marcado por la apatía general, el calor y el cansancio. El alcalde, Enrique Tierno, golpeó en repetidas ocasiones el micrófono para acallar los cuchicheos de los concejales, más entregados a la charla que al desarrollo del pleno.