_
_
_
_
A una semana de las elecciones en Israel

Un país al borde del 'holocausto económico'

I. C.,Durante largos años, los asalariados israelíes parecieron inmunes a la inflación, gracias a un original sistema, que revalorizaba periódicamente sus sueldos y ahorros; pero su ritmo disparatado del 97% en los cinco primeros meses de 1984 -probablemente, 400% en todo el año- ha acabado empobreciendo a amplias capas de la población activa.

Y nunca, en los 46 años de historia de Israel, se han perdido tantas jornadas de trabajo por huelgas, que han paralizado a gran parte del país, al borde del holocausto económico", según un grupo de economistas.

" Un bajón del nivel de vida es inevitable", afirmó a principios de año, al presentar su anteproyecto de presupuesto, el ministro de Hacienda, Ygal Cohen Orgad; pero cuando pronunció esta frase, el poder adquisitivo de millones de israclíes llevaba ya varios meses disminuyendo. De agosto del año pasado a marzo del presente, los salarios reales de los israelíes se depreciaron en un 12%, según el muy oficial Instituto Israelí de Estudio de los Ingresos y de la Productividad. Pero si se compara el primer trimestre de 1983 con el mismo período de 1984, la pérdida es del 14,6%, en general, y del 20% para los funcionarios, sostiene el diario Haaretz, el más solvente de los rotativos israelíes.

Más información
El alto precio de la guerra

La también oficial Oficina Central de Estadística señalaba en su informe de junio que los ingresos necesarios para mantener a una familia media se situaban en 145.000 sheke1s mensuales (670 dólares o 100.500 pesetas), cuando los recursos medios de los hogares ascendían a tan sólo 550 dólares (85.000 pesetas).

En un sondeo publicado ese mismo mes por Haaretz, el 84% de los encuestados se declaraba convencido de que el aumento de sus sueldos no alcanzaba el incremento del coste de la vida, y el 67% reconocía que no conseguía terminar el mes sin echar mano de sus ahorros o endeudarse.

Pero si la depreciación de los estipendios es un fenómeno relativamente reciente, las jubilaciones y las subvenciones por familias numerosas llevan, por lo menos, siete años devaluándose, desde la victoria electoral de la coalición derechista del Likud, según el Instituto de Seguros Nacionales.

Indignado, el ex presidente y número dos de la lista de candidatos laboristas a la Kneset (Parlamento), Isaac Navon, afirmaba en las páginas de ese mismo periódico que "el elevado porcentaje de gente que vive ahora en la pobreza a causa de la política económica seguida tendrá consecuencias sociales y psicológicas muy graves para la nación".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_