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Serio revés para Ferdinand Marcos en las elecciones legislativas Filipinas

ENVIADO ESPECIAL Las elecciones legislativas del lunes en Filipinas han supuesto, a falta de resultados oficiales definitivos (lo que probablemente no ocurra hasta el próximo lunes) un duro golpe para el régimen del presidente Ferdinánd Marcos, que reconoció ayer ante la televisión norteamericana la derrota de su partido en Manila y otras importantes ciudades, aunque insiste en que en el conjunto del país su victoria será rotunda, con una cómoda mayoría absoluta.

El jefe de campaña de la coalición opositora Organización Democrática Opositora Unida (UNIDO) afirmó ayer que los adversarios de Marcos pueden conseguir 75 escaños de los 183 en juego (los 17 restantes, hasta un total de 200, son nombrados directamente por el jefe del Estado).

Por su parte, el Centro de Operaciones por unas Elecciones Libres (NAMFREL), cuyos miles de voluntarios están efectuando un escrutinio paralelo, informaban anoche que la oposición y los candidatos independientes Se habían asegurado ya la victoria para 91 de los escaños, frente a 79.para el oficialista Movimiento de la Nueva Sociedad (KBL).

En sus declaraciones a la televisión estadounidense, Marcos se mostró seguro de una "sólida victoria", a pesar de lo que llamó .una corriente subterránea de descontento" provocada por la crisis económica. Su previsión es que el KBL conseguirá 140 escaños.

Según Marcos, los votantes han demostrado que no creen en su implicación en el asesinato del senador Benigno Aquino, hace nueve meses, ya que, de otra forma, "habríamos perdido en todo el país". Y rechazó la posibilidad de que en caso de derrota de su partido anule los resultados por decreto.

La locuacidad del presidente Marcos ante los periodistas de EE UU contrastó con el silencio mantenido en su propio país. Treinta horas después de haberse cerrado los colegios, ni él ni su esposa Imelda, que habitualmente aparecen a diario en televisión, habían hecho comentario alguno.

La coalición opositora UNIDO contaba en el gran Manila con 1,3 escaños seguros y dos probales. La gobernadora de Metromanila, Imelda Marcos, había anunciado una victoria del KBL, por 21 a 0".

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La oposición al régimen de Marcos supera las previsiones del Gobierno aunque no parece poder alcanzar la mayoría absoluta

Viene de la primera páginaDe igual manera que los optimistas cálculos de Imelda Marcos sobre los resultados en Manila fueron echados abajo por la evidencia de la victoria de la oposición, las previsiones del presidente de que sus enemigos políticos conseguirían, como máximo, de 20 a 30 escaños en la Asamblea Nacional quedaron descalificadas.

Los primeros resultados parciales garantizan a la oposición y a los independientes un mínimo de 50 escaños. Los más optimistas, como el jefe de la campaña electoral de Unido, Ernesto Maceda, aseguran que esa cifra subirá hasta 75 puestos en la Cámara, mientras que otros analistas se inclinan por 60 o 65 escaños.

En cualquier caso, mucho más de lo previsto por la generalidad de los observadores y sondeos (le opinión pública.

El Movimiento de la Nueva Sociedad (KBL), de Ferdinand Marcos, afirmaba tener seguros anoche 91 escaños de la Asamblea, Más los 17 que nombra directamente el presidente, con lo que su mayoría absoluta estaría garantizada.

La fuerza de la maquinaria política del KBL en las zonas rurales quedó probada en Tarlac, pueblo natal del asesinado senador Benigno Aquino, donde fueron elegidos dos diputados del partido de Marcos. La hija del presidente, Imee Marcos Manotoc, ganó fácilmente su escaño en la provincia familiar de llocos Norte.

El temor al fraude

La Comisión Electoral oficial prosigue su lento recuento de los votos sin anunciar una fecha para la publicación de los resultados definitivos. Ante el temor de manipulaciones o cambios de urnas, unos millares de personas se concentraron anoche, con velas encendidas en los alrededores de la catedral de Manila, cerca de la sede de la Comisión Electoral, para realizar una manifestación de vigilancia mientras dure el recuento oficial.

Los datos difundidos por el Movimiento Nacional de Ciudadanos por unas Elecciones Libres (NAMFREL) fueron puestos en duda ayer por algunos candidatos derrotados del partido gubernamental como el alcalde de la ciudad de Manila, que declaró que piensa pedir un nuevo recuento de los sufragios.

Roger Davis, uno de los dirigentes de NAMFREL, declaró a EL PAIS que los datos oficiales tendrán que coincidir forzosamente con los hechos públicos por su organización, ya que los voluntarios tomaron las cifras de los colegios electorales apenas terminado el recuento.

Todavía no se conoce con exactitud- el porcentaje de abstenciones, pero algunos diarios estiman que un 83% de los votantes registrados acudió a las urnas el lunes. El movimiénto proboicoteo de los comicios ha obtenido peores resultados de los que esperaban sus orgánizadores y algunos miembros del otro sector de la oposición. Si no se hubiese producido ese llamaniÍento a la abstención, la oposición podría haber visto incrementada notablemente su presencia en la Batasang Pambansa (Parlamento).

En cualquier caso, si el presidente Marcos sigue usando sus poderes especiales, no importaría qué la mayoría de la Asamblea Nacional estuviera en manos de la oposición, porque puede gobernar por decreto-ley, ignor ando al cuerpo legislativo. Claro que la necesidad de créditos internacionales y de lavar la cara a su régimen le deben obligar a moderar su forma de gobierno autoritaria.

En medios de la oposición se comentaba anoche que Marcos está 'Iconmocionado" por los resultados, y atribuyen a este hecho su tardanza en dirigirse al país. La posibilidad de un pucherazo electoral se teme también en estos medios, aunque unos resultados oficiales sustancialmente diferentes de los difundidos por NAMFREL podrían provocar problemas de órden público y acabar con la ya escasa credibilidad del régimen en la escena internacional.

Las cifras de la violencia

Aparte de disputas verbales entre candidatos y acusaciones mutuas de fraude, la jornada de ayer transcurrió tranquila en casi todo el país. Las cifras oficiales de las víctimas del pasado lunes aumentaron de nuevo, según el último informe oficial, que las estableció en 91 muertos y 44 heridos. De los muertos, 60 eran policías o militares, 16 guerrilleros del NPA (Nuevo Ejército Popular, maoísta) y 15 civiles.

El general Fidel Ramos, jefe de la policía, declaró que eistas cifras eran considerablemente más bajas que en las elecciones de 1971 (un alío antes de que Marcos instaurara la ley marcial, que duraría una delcada), año en que los muertos sumaron 335.

El número de urnas robadas el lunes en distintos puntos del país rondó los 300, según dijo el citado general.

Varios ministros de Marcos resultaron derrotados en los comicios, lo que les costará dejar próxiniamente el Gobierno, ya que el presidente quiere ahora que al menos la mitad de su Gabinete tenga cargos representativos.

Mientras el país espera conocer los resultados definitivos de estas primeras elecciones, celebradas tras el levantamiento, en 1981, de la ley marcial, las autoridades hicieron ayer un llamamiento a la población para que no se deje llevar por el pánico y no almacene arroz, jabón y azúcar, productos que faltan en las tiendas desde hace algunas semanas, una carencia que el Gobierno atribuye a los acaparadores, que esperan una próxima subida de precios de estos productos.

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