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Escaso entusiasmo la RFA ante las elecciones europeas del mes de junio

Sólo falta un mes para el 17 de junio, fecha prevista para las elecciones europeas en la RFA, y la animación es escasa. En los siete mítines de Vogel el pasado fin de semana se reunieron varios cientos de personas, un millar al máximo en alguna de las ciudades. En su discurso tipo, Vogel reconoce la frustración reinante en la RFA ante la marcha de la política europea, ante los mares de leche, las montañas de carne y las cumbres fracasadas, pero añade que "no hay una alternativa" y la CEE es indispensable para la RFA, donde gran cantidad de puestos de trabajo dependen de las exportaciones a los países de la Europa comunitaria.Vogel cosecha aplausos del público cuando dice que Europa tiene que desarrollar una política independiente frente a las superpotencias y "queremos ser aliados y no vasallos en Estados Unidos". En uno de los mítines, en Hanau, Estado de Hesse, el político socialdemócrata se refiere a la ampliación de la CEE al sur y dice que esos dos Estados "España y Portugal salieron de la dictadura con nuestra ayuda y ahora tenemos que ayudarles para que entren en la Comunidad, aunque esto suponga una carga económica". El público aplaude en la sala de Hanau las palabras de Vogel. El local es una especie de salón parroquial, gigantesco y desangelado, que parece escapado de un decorado de los años cincuenta. El sábado por la tarde Hanau es una ciudad desierta, el frío obligó a celebrar el mitin en un local cerrado y quedó frustrada la fiesta europea prevista por el SPD de la localidad.

Antes de Vogel habló la candidata al Parlamento europeo, Heidi Wieczorek-Zeul, que en la época dorada de las juventudes socialistas (jusos), era la pesadilla de la dirección del SPD, cuando la Prensa la bautizó con el nombre de Heidi la Roja. Hoy día Heidi lleva encima cinco años de Parlamento europeo y se presenta a la reelección.

El temor ante las elecciones al Parlamento europeo en la RFA es que se produzca una abstención masiva, que podría llegar hasta el 50% en un país donde tradicional mente la participación electoral es elevada. Las leyes no escritas de la sociología electoral dicen que en la RFA la abstención perjudica al PSI). Vogel arenga a su público para que el 17 de junio acuda a las urnas, porque de esa forma se fortalece el Parlamento europeo, que es la organización menos burocratizada y donde los ideales de Europa encuentran una mayor expresión. A pesar de los llamamientos de Vogel, hasta en las filas socialdemócratas se contempla con escepticismo la elección al Parlamento europeo.

El SPD quiere aprovechar la elección europea para un ajuste de cuentas con el Gobierno de Bonn. A los 14 meses de las elecciones perdidas, el 6 de marzo del año pasado, los socialdemócratas (SPD) han recuperado el optimismo, más por los errores del Gobierno de centro-derecha de Bonn que por méritos propios.

La amnistía fiscal

Vogel aprovechó su espacio publicitario en la televisión, con motivo de las elecciones europeas, para sacar a relucir el tema de la amnistía a los implicados en las donaciones a los partidos políticos. El Gobierno Kohl-Genscher pretende la amnistía de los implicados en el fraude fiscal, buena parte de los nombres más prestigiosos de la industria alemana (Bayer, Mercedes, Porsche, Grunding y un largo etcétera) y casi dos docenas de políticos, entre los que figuran nada menos que tres ministros, dos secretarios de Estado y nueve diputados.Con el tema de la amnistía fiscal Vogel espera movilizar al electorado y debilitar al Gobierno de Bonn. El tema no es estrictamente europeo, pero Vogel sonríe maliciosamente cuando comenta a los periodistas que le acompañan que "con este asunto se contribuye a la conservación de la cultura jurídica europea". Luego, ante el auditorio, Vogel sitúa el asunto en un contexto europeo cuando dice que "ni siquiera determinadas organizaciones, que actúan en el sur de Italia, se atreverían a pedir una amnistía así para sus delitos".

En el coche-restaurante del tren especial, Vogel muestra a los periodistas parte de la correspondencia recibida con motivo de los, planes de amnistía del Gobierno. "Tengo 51 años y es la primera vez en mi vida que protesto por algo, pero cuando escuché la noticia de la amnistía me quedé sin aliento", escribe uno. Otro escribe: "Procedo de una familia campesina en la que siempre la justicia fue el primer mandamiento. Yo he sido político durante 34 años, y tanto yo como mi familia nos sentimos identificados con el régimen democrático. Espero que se encuentren suficientes hombres decentes para rechazar una ley que sólo sirve a los privilegiados de la sociedad".

Casi todas las cartas se pronuncian contra los manejos del Gobierno de Bonn. La duda es si la campaña contra la amnistía, favorece al SPD o si se aprovecharán de ella los verdes.

Por todas las ciudades por las que pasó Vogel aparecían colgados los pasquines de los verdes con una foto de Kohl y el texto "Ilegal, a la mierda lo legal".

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