8.000 personas se manifestaron ante el Ministerio de Industria para protestar contra los planes de reconversión naval

Unas 8.000 personas se manifestaron en la tarde de ayer desde la Plaza de Castilla al Ministerio de Industria, convocadas por CC OO y la Intersindical Nacional de Trabajadores Gallegos (INTG), para protestar contra los planes del Gobierno sobre la reconversión naval. Los manifestantes, procedentes de distintos puntos de España, se disolvieron tras una larga espera para que los recibiera el titular de Industria, Carlos Solchaga. A la manifestación se sumó el ex secretario general del PCE, Santiago Carrillo, y a lo largo de la misma se coreraron eslóganes en contra del Gobierno "Felipe, Guerra, el cambio es una mierda"; "qué bien vive el burgués con Solchaga y Boyer", etcétera. Un impresionante despliegue policial cubría las inmediaciones del ministerio.

Fuentes de Industria aseguraron que a primera hora de la mañana se había comunicado a CC OO que no serían recibidos los manifestantes. Por otra parte, los líderes, antes de que se disolviera la concentración, anunciaron continuas movilizaciones en los centros de trabajo para impedir que se publique el decreto sobre la reconversión naval.Por la mañana, en el anfiteatro de la Casa de Campo, unas 4.000 personas se concentraron para escuchar a distintos dirigentes sindicales y alcaldes de poblaciones afectadas por la reconversión. En las gradas, numerosas pancartas de Comisiones Obreras, INTG y USO, junto a algunas banderas autonómicas, reivindicaban lemas acordes con la convocatoria: "Factorías Vulcano, contra las bolsas de paro", "No a la reconversión salvaje", "Por la nacionalización del sector naval", etcétera.

El número de concentrados, muy inferior al previsto en un principio (se llegó a hablar en fechas previas de que acudirían a Madrid entre 15.000 y 20.000 trabajadores del sector), hizo que los organizadores insistieran una y otra vez en que los concentrados no abandonaran el anfiteatro, para conducirlos desde allí a la manifestación prevista para la tarde y evitar que se desperdigaran por Madrid.

Militantes del sindicato gallego INTG se encontraban ayer en Madrid, desautorizando expresamente con su presencia al secretario general de la citada organización, Xan Carballo, que en vísperas de la movilización difundió un comunicado a la Prensa afirmando que no participarían en la marcha sobre Madrid por entender que se trata de un acto "folklorista y confuso" y no de carácter reivindicativo.

Nostalgia de Abril Martorell

El secretario general de CC OO, Marcelino Camacho, recordó ante los concentrados que la lucha en los astilleros no es de ahora, sino que se viene produciendo desde hace años.En tiempos de Abril Martorell, dijo, nuestras movilizaciones sirvieron para algo, "no es que cumplieran las momesas que nos hacían, pero al menos logramos conservar los puestos de trabajo y que no echaran a nadie. Y hay que decir que ahora es este Gobierno, que se presentó con la creación de puestos de trabajo como principal objetivo, quien intenta desertizar y desindustrializar el país, con una política de reconversión desligada de cualquier plan reindustrializador".

Camacho, tras recordar que a los obreros nunca se les ha regalado nada y que las mejoras siempre se han conquistado con lucha, dijo que Felipe González y Miguel Boyer mienten cuando aseguran que la economía va mejor. "Han aumentado 500.000 parados desde octubre de 1982, medio millón de personas que no generan riqueza, y aún se atreven a decir que la economía mejora".

Felipe González y Miguel Boyer están sirviendo a los intereses del gran capital, según el líder de Comisiones Obreras, y no se sonrojan cuando los presidentes de los grandes bancos, como Alejandro Albert, del Hispano Americano, o Alfonso Escámez, del Central, manifiestan que asumen su política.