La capilla ardiente por el 'etarra' Goikoetxea, en el salón municipal de plenos de Hernani
La capilla ardiente por el cadáver del miembro de ETA Militar, Rafael Goikoetxea, víctima de un atentado perpetrado en Francia por los GAL, quedó instalada ayer en el salón de plenos del ayuntamiento de la localidad guipuzcoana de Hernani. Un grupo de simpatizantes de Herri Batasuna y Auzolán, que se había concentrado en el paso fronterizo de Irún para recibir los restos mortales del terrorista, fue disuelto contundentemente por la Policía Nacional. De las ocho personas que resultaron heridas, cuatro fueron ingresadas en el hospital de la Cruz Roja de San Sebastián.Alrededor de la 13.30 de ayer quedó cortado el paso fronterizo del puente internacional que une la localidad guipuzcoana de Irún con la francesa de Hendaya para dar paso al vehículo que transportaba los restos mortales del terrorista. Un furgón blanco atravesó la frontera y recorrió, escoltado por dotaciones de la Guardia Civil, la autopista hasta llegar a la villa natal de la víctima.
La corporación de la mencionada localidad, que está compuesta por siete concejales de Herri Batasuna, siete del PSOE, cinco del PNV y uno de Euskadiko Ezkerra, acordó en el curso de una sesión plenaria -en la que no estuvieron presente los ediles socialistas- costear los gastos de traslado del féretro desde la localidad francesa de Bayona hasta la localidad guipuzcoana de Hernani. Por otra parte, la coalición abertzale radical Herri Batasuna ha convocado a sus militantes a una concentración que se celebrará hoy en Hernani, después del funeral religioso.
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