Beirut, nuevamente cortado en dos por los bombardeos en la 'línea verde'

El paso entre los sectores oriental y occidental de Beirut fue cerrado ayer por las autoridades libanesas, tras las explosiones de granadas y el intenso cruce de proyectiles registrados ayer por la mañana en las inmediaciones de la línea verde.

La radio oficial libanesa informó ayer que la policía mantendrá bloqueado el paso entre los dos sectores hasta que el comité militar, responsable de la efectividad del alto el fuego, pueda garantizar de nuevo la seguridad de los civiles en dicha zona.

Al menos siete personas murieron y otras 35 resultaron heridas en los violentos combates registrados ayer en Trípoli entre milicias del Partido Árabe Democrático (ADP), que mantiene desde hace meses el control de la mayor parte de la ciudad, y las fuerzas del Movimiento de Unificación Islámica sunita.

Al parecer, los combates se produjeron después de que hombres armados dispararan sobre un coche en él que viajaban miembros del ADP de tendencia prosiria, hiriendo a uno de ellos.

El presidente libanés, Amin Gemayel, reanudó ayer, por otra parte, los contactos con la oposición con objeto de lograr un acuerdo para establecer una serie de reformas políticas que podrían estar encaminadas a la formación de un Gobierno de unidad nacional.

Líderes de la oposición libanesa se reunieron el domingo por la noche para elaborar una estrategia de cara a la entrevista celebrada posteriormente con el vicepresidente sirio, Abdel Halim Jadam.