Protesta de unos 600 afectados de la colza por la posible desaparición de las ayudas

Unas 600 personas asistieron ayer a una asamblea general de la Coordinadora de Asociaciones de Afectados por el Síndrome Tóxico, que se celebró en el Palacio de los Deportes de Madrid. Durante la asamblea intervinieron distintos representantes de los enfermos, los cuales anunciaron su deseo de luchar contra la desaparición de las ayudas familiares para los afectados por el envenenamiento por aceite de colza -prevista para el próximo día 1 de julio- y contra la desaparición del Plan Nacional para el Síndrome Tóxico. El Ministerio de Sanidad asumirá las competencias de este plan.

Los asistentes -alguno de los cuales iban en sillas de ruedas o tuvo que ser atendido por los servicios sanitarios- también explicaron la reciente marcha a la Organización Mundial de la Salud, en Ginebra, cuyo presupuesto fue de tres millones de pesetas. A la marcha asistieron 350 afectados, recibiendo únicamente ayuda del Ayuntamiento de Coslada y de las organizaciones de emigrantes en Europa.Para los representantes de la coordinadora, desde finales de 1982 el Plan Nacional del Síndrome Tóxico no ha aportado nuevos datos, y "mientras en las estadísticas de la comisión clínica aparecen un 30% de afectados sin síntomas, oficialmente se anuncian que son el 85%". A la vez, se ha reducido el número de afectados que aparecían en listas anteriores, según los citados representantes, y no se ha dado un solo paso en la investigación epidemiológica.

El representante de la asociación de Coslada atacó al responsable de acción social del PSOE, Ciriaco de Vicente; al presidente del Senado, Federico de Carvajal, y al Defensor del Pueblo, Joaquín Ruiz-Giménez, por su falta de preocupación por sus problemas.

Sobre Ruiz-Giménez el representante de Coslada indicó que había actuado de "cartero con el Plan Nacional, y para carteros, basta ya con nosotros". De la misma manera, levantó los aplausos de los asistentes el presidente de la federación de Valladolid, quien dijo: "Lo único que hemos conseguido ha sido frenar la desaparición del Plan Nacional para el Síndrome Tóxico por esta Administración", lo que suscitó el entusiasmo de los presentes.

Finalmente, anunciaron que van a mantener una reunión con el partido comunista para presentar una interpelación en el Congreso de los Diputados y se vuelva a discutir en la Cámara este tema. Concluyó que no se va a emplear la violencia en la lucha contra la Administración, pero "si Carmen Salanueva, directora del Plan Nacional, nos sigue mandando a la policía para que nos pegue con sus porras, tomaremos otras medidas".