España presenta de nuevo su candidatura a la Conferencia de Desarme de la ONU
España reiteró ayer su deseo de incorporarse como miembro de pleno derecho a la Conferencia de Desarme de las Naciones Unidas tan pronto como la Asamblea General de la ONU apruebe la ampliación. El embajador, Alfonso de la Serna, defendió la candidatura, apoyándose en la voluntad e interés del Gobierno por participar cada vez más activamente en este órgano de consulta y negociación, en el que están representadas las cinco potencias nucleares y 35 Estados más, en representación de todas las áreas geográficas y bloques militares.
Nuestro país, que tiene estatuto de observador, difícilmente podría pasar a titular, ya que las autoridades noruegas también aspiran a ello. Según ha podido saber EL PAIS, la ambigüedad de España en el seno de la OTAN puede hacer que Estados Unidos y el bloque occidental prefieran la candidatura de Oslo a la de Madrid.En su intervención, De la Serna abogó en favor de nuevos acuerdos de control de armamento y desarme. España, sostuvo, es partidaria de desarrollar los convenios existentes sobre la exploración y uso del espacio extraterrestre. El emplazamiento de "satélites de destrucción", precisó, es una posibilidad cada vez más cercana, que puede significar un paso más en la carrera de armamentos. De ahí que la comunidad internacional, y en particular los Estados que hoy poseen una tecnología espacial desarrollada, deban asumir, dijo, la responsabilidad de mantener el espacio extraterrestre tan pacífico como lo ha sido desde el origen del universo.
De la Serna defendió también la necesidad de un tratado que prohíba "completa y permanentemente" los ensayos nucleares, al tiempo que pedía un nuevo instrumento internacional "que complemente el protocolo de Ginebra de 1925 y que proscriba para siempre el desarrollo, fabricación, almacenamiento y utilización de armas químicas y disponga la destrucción y utilización de los arsenales y plantas de producción ya existentes".
Después de recordar los "momentos de peligrosa tensión internacional" que vive el mundo, De la Serna dejó constancia de "la preocupación" del Gobierno español por la suspensión de las conversaciones de desarme entre Estados Unidos y la Unión Soviética sobre los euromisiles (INF) y las armas estratégicas intercontinentales (START). España, añadió, observa con esperanza las negociaciones de Viena sobre reducción de armas convencionales y tropas en Europa central, y trabaja en la primera fase de la Conferencia sobre Medidas de Fomento de la Confianza y la Seguridad, que se desarrolla en Estocolmo.
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