Fallece el cocinero del embajador español, víctima de la epidemia declarada en Malabo
El cocinero de Antonio García Abad, embajador español en Guinea Ecuatorial, falleció en la noche del martes en el Hospital General de Malabo. Con ésta ya son 10 las muertes ocasionadas por la epidemia que desde el lunes de la semana pasada asola el país.La colonia española, compuesta por 600 personas, sigue sin novedad, pero la psicosis se extiende a medida que pasan las horas, sobre todo entre las familias con niños, muchas de las cuales están ya preparando las maletas para intentar regresar a España en el avión del próximo sábado.
Las autoridades ecuatoguineanas han aconsejado a la población que acuda al Hospital General de Malabo al menor síntoma relacionado con la epidemia: dolores abdominales seguidos de diarrea e intensos ataques de tos.
Hasta ahora fueron atendidas en el centro 90 personas, de las que 20 fueron dadas de alta, y sólo 28 se encuentran graves, según fuentes oficiales.
El número de ingresos fue menor en la madrugada de ayer, aunque continúa la afluencia de enfermos, muchos de los cuales no padecen más que diarreas y son dados de alta en pocas horas.
Aunque los médicos cubanos insisten en que se trata de un brote de cólera, ni el Ministerio de Sanidad guineano ni los médicos cooperantes españoles quieren pronunciarse hasta saber el resultado de los análisis.
Higinio Casamayor, jefe de la cooperación sanitaria española, viajó el martes a Yaunde, capital de Camerún, con muestras sanitarias. Se esperaba que regresase anoche con los resultados y que trajera consigo los productos necesarios para que los análisis puedan ser efectuados en Guinea Ecuatorial.
Otras muestras fueron enviadas el martes a Las Palmas en un vuelo regular de Iberia y hoy podrá conocerse el informe del laboratorio.
El coordinador de la cooperación sanitaria de Río Muni aseguró que son falsas las noticias de brotes epidémicos en el continente.
Los rumores y los bulos corren de un lado para otro. El pueblo está asustado, ya que ésta es la primera vez que se encuentra ante un caso parecido, y empieza a hablar de morimo o magia negra.
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