Uribe rodará sobre la intolerancia, a través de la vida de Ignacio de Loyola

Imanol Uribe, director de la película La muerte de Mikel, una de las más taquilleras del país en las últimas fechas, anunció en Tenerife, cuando finalizó la campaña de promoción de su trabajo cinematográfico -que cierra una trilogía iniciada con El proceso de Burgos y La fuga de Segovia-, que su próximo proyecto estará dedicado a la figura de san Ignacio de Loyola, con el propósito de profundizar en los comportamientos sociales que en nuestra sociedad provoca aún la intolerancia.El director vasco señaló que seis semanas después del estreno de su película -de la que se han obtenido 30 copias, cifra inusual en la industría cinematográfica del país-, ha despejado totalmente su inicial duda de que la misma pudiera ser utilizada políticamente. La obra, que ofrece una visión sociopolítica de la realidad de Euskadi a través de las relaciones homosexuales de sus dos principales protagonistas, ha sido aceptada de manera unánime por la crítica de cine del País Vasco, a pesar de su tono escéptico en el planteamiento político del tema. Uribe opina que la censura ha empeorado en dicha región en los últimos tiempos. No obstante, valoró positivamente el apoyo que presta el Gobierno autónomo al cine vasco y lanzó una invitación a las comunidades autónomas del país para que secunden dicha iniciativa. El 25% del presupuesto de La muerte de Miquel fue subvencionado por el Ejecutivo vasco.

La película, que ha sido vista hasta ahora por 600.000 espectadores, recibió recientemente el espaldarazo internacional en el Festival Internacional de Cine de Berlín, donde participó fuera de concurso, concitando el máximo interés del público y la crítica. El éxito alemán le ha permitido adquirir proyección fuera de España, después de la adquisición que han hecho de la misma Estados Un¡dos y Austria.