El Reino Unido no pagará a la Comunidad un adelanto extraordinario de 100 millones de libras

El Gobierno británico anunció ayer en el Parlamento que no entregará este mes el adelanto de 100 millones de libras (unos 21.500 millones de pesetas) que le solicitó realizar la CEE para antes del próximo 31 de marzo. Al hacer esta declaración, el ministro de Asuntos Exteriores, Geoffrey Howe, afirmó, sin embargo, que el Reino Unido seguirá pagando a la Comunidad Económica Europea sus obligaciones regulares.

El anuncio fue realizado a primera hora de la tarde en la Cámara de los Comunes, después de haber sido decidida por el Consejo de Ministros. Esta es la respuesta de Londres a la decisión comunitaria de retener la devolución del cheque de 1983 que salda la contribución británica al presupuesto de la CEE.Esta decisión del Gobierno de Margaret Thatcher, adoptada ante las presiones de la opinión pública, después del nuevo fracaso de Bruselas, responde, según los observadores, a dos objetivos: por una parte, permitir que continúen las negociaciones para poder satisfacer las exigencias británicas, sin aumentar el aislamiento en el que ahora se encuentra el Reino Unido en el seno de la CEE; y, por otra parte, pretende dar satisfacción parcial a la opinión pública británica por el bloqueo de los demás miembros del Mercado Común a la devolución de 750 millones de ECU (unidad de cuenta europea) que le corresponden por su contribución del pasado año y a la falta de solución duradera al problema de sus pagos a la CEE.

La oposición laborista, a través de su portavoz para asuntos europeos, Robin Cook, señaló que la postura del Gobierno era demasiado blanda.

Geoffrey Howe señaló que su Gobierno está dispuesto a considerar un aumento del porcentaje del IVA (Impuesto al Valor Añadido) al presupuesto comunitario pero "sólo si logramos un control eficaz de los gastos y una repartición equitativa del paquete financiero".

Ayer por la tarde no se conocía todavía ninguna reacción oficial en Bruselas sobre esta postura del Reino Unido. En medios comunitarios se subrayaba que estos 100 millones de libras que se niega a ingresar el Reino Unido corresponden a una entrega excepcional solicitada a los diez por la CEE.

Apoyo alemán al ingreso español

El canciller de la República Federal de Alemania, el democristiano Helmut Kohl, y el jefe de la oposición socialdemócrata, Hans-Jochen Vogel, mostraron su acuerdo y satisfacción por el ingreso de España y Portugal en la Comunidad Económica Europea (CEE), aunque implique un aumento de los gastos comunitarios, informa José Comas. En estos términos se manifestaron ayer en el Bundestag (Parlamento), en Bonn, los dos políticos, en el debate parlamentario sobre la reciente cumbre europea de Bruselas. Tanto Gobierno como oposición se mostraron favorables a superar sus actuales diferencias ideológicas y a colaborar conjuntamente para superar la actual crisis de la CEE.

El canciller declaró en su intervención que estaba dispuesto a participar en un Consejo extraordinario de jefes de Estado y de Gobierno antes de la próxima cumbre regular, que se celebrará en París, en junio.

La portavoz del grupo parlamentario verde (ecologistas y pacifistas), Petra Kelly, denunció en su intervención que "España pague el precio por la entrada en la CEE mandando a sus hijos a la OTAN", y añadió que "nosotros también rechazamos ese precio". Kohl trazó un cuadro relativamente positivo sobre la cumbre de Bruselas y destacó entre lo conseguido "el acuerdo sobre la subida del IVA del 1 % al 1,4%, en conexión con la entrada de España y Portugal a la CEE".

El socialdemócrata Vogel saludó el acuerdo conseguido y añadió que "sabemos que ese ingreso lleva aparejadas consecuencias financieras, pero la península Ibérica pertenece a Europa y ni queremos, ni podemos, retirar la mano que alargamos a las democracias de esos dos países que, con nuestra ayuda, salieron de las dictaduras".

Según informa Nicole Guardiola desde Lisboa, Helmut Kohl reafirmó ayer en la capital portuguesa el apoyo de su Gobierno al ingreso de las dos naciones ibéricas. El canciller de la RFA se entrevistó con el primer ministro Mario Soares y otros miembros de su Gabinete, durante la visita de 24 horas que realizó a Lisboa. Las autoridades portuguesas han minimizado deliberadamente la incidencia del fracaso de la cumbre de Bruselas, y algunos miembros del Ejecutivo, como el ministro de Asuntos Exteriores, han señalado que "no se puede hablar siquiera del fracaso de una reunión en la que los diez no se pusieron de acuerdo sobre un punto, pero llegaron a conclusiones importantes sobre otros.