No hubo pujas por el testamento de Enrique II
El testamento de Enrique II de Castilla no fue subastado ayer, en la sala Durán, de Madrid, al no cubrirse el precio de salida de 1.200.000 pesetas, por lo que el documento volverá a su propietario, Antonio de Castro. Era el lote más alto de la sesión, donde superaron las 100.000 pesetas obras de Francisco de Pisa, Luis del Mármol, S. V. Villegas, Francisco Guichardino y Luis de la Cueva, entre otros. Un libro de Francisco Fanco se vendió en 22.000 pesetas.Horas antes de la subasta del traslado autorizado y testificado en presencia del testamento original de Enrique II rey de Castilla, del siglo XIV, el documento había sido declarado inexportable por el Ministerio de Cultura, de acuerdo con la ley de Defensa del Tesoro Documental y Bibliográfico. Por este mismo motivo, el Estado pensaba ejercer el derecho de tanteo en el caso de que se hubiera cubierto el precio de adjudicación.
Acudió a la subasta Ricardo Jerez, jefe del Servicio de Racionalización de Archivos, que abandonó al no existir puja por el documento. Jerez manifestó que esperaba que el propietario se pusiera en comunicación con la Administración "para tratar de la compra directa del documento en otros términos, no en estas exageraciones". Añadió que en la adquisición de este tipo de documentos históricos "el Estado debe pagar lo justo".
El propietario del documento ofreció hace unos meses la venta del documento al Centro Nacional del Tesoro Documental y Bibliográfico por un millón y medio de pesetas, sin llegar a un acuerdo al recibir una contraoferta de 1.200.000 pesetas, el mismo precio de salida en la subasta.
El libro Raza. Anecdotario para el guión de una película (1942), de Jaime de Andrade, seudónimo de Francisco Franco, se adjudicó en 22.000 pesetas. El cineasta José Luis Sáenz de Heredia, presente en la sala, aseguró no ser el autor de la oferta, recibida por escrito.
