Los patrones de los dos pesqueros comparecen ante el fiscal

ENVIADO ESPECIALLos patrones de los dos pesqueros vascos ametrallados y apresados el pasado miércoles por buques de guerra franceses comparecieron ayer ante el Fiscal de la República de Lorient, Roger Tacheau. Se les acusa de destrucción de un bien público, por tentativa de abordaje al barco de guerra Teniente de navio Lavallee, así como de pescar en zona prohibida y de haberse negado a obedecer la orden de parar motores cuando fueron requeridos.

Mariano Solabarrieta, patrón del Valle de Atxondo, puede ser condenado a diez años de cárcel y a una multa de entre 5.000 y 200.000 francos franceses (entre 100.000 y 4 millones de pesetas), multa similar a la que le puede re caer al otro patrono del Burgoa mendi, Javier Aldazabal. La vista de la causa ha sido fijada para el próximo jueves en el tribunal de Lorient. Ambos patrones y las tripulaciones han visto restringidas su libertad de movimiento hasta su comparecencia en el juicio.

Fernando Gómez dos Santos, a quien se le ha amputado una pierna, y Eusebio Goimendi continuarán ingresados, al menos durante las próximas dos semanas, en el hospital de Instrucción de la Marina, en Brest. Goimendi será intervenido quirúrgicamente este lunes de fractura en el peroné.

Francisco da Silva, Jesús Martín, Domeka Solabarría y Pedro Uribe Solabarrieta, cuatro de los seis pescadores heridos en el incidente, abandonaron ayer el hospital de Brest y se incorporaron a su barco, el Valle de Atxondo, que, al igual que el Burgoamendi, se encuentra fondeado en el puerto de Lorient. Patrulleras francesas continúan amarradas al costado de los pesqueros vascos para impedirles la fuga, algo prácticamente. imposible para el Valle de Atxondo, que tras el ataque tuvo que ser remolcado a puerto. A la vista de los importantes desperfectos de este barco, sus propietarios estudiaban ayer la posibilidad de abandonarlo en el caso de que los tribunales franceses fijen sanciones económicas mucho más elevadas que las habituales.

José Ramón Gorricho, uno de los propietarios del Valle de Atxondo, presentará, a través del seguro, una reclamación contra el Gobierno francés.