La directora sueca Mai Zetterfing rodará su próxima película en Barcelona, sobre la novelista Agnes von Krusensjerna

La directora de cine sueca Mai Zetterling ha estado recientemente en Barcelona localizando escenarios para su próxima película, Of the same blood (De la misma sangre), basada en la vida de la novelista sueca Agnes von Krusensjerna. "En realidad, Agnes nunca estuvo en Barcelona", dice Mai Zetterling. "Ella vino a España en 1934 y visitó Madrid, Granada y Málaga. Mi primera idea fue rodar en esta última ciudad, pero el manicomio donde Agnes estuvo internada no refleja el ambiente que yo necesito, y que he encontrado aquí, especialmente en algunos interiores de Gaudí".

Agnes von Krusensjerna, cuyas obras nunca han sido traducidas al castellano, escribió largas sagas familiares, muy autobiográficas, y que fueron calificadas de escandalosas, indecentes y amorales por la sociedad de la época. Sus personajes eran fácilmente reconocibles, lo que ocasionó muchos disgustos, y tocaba temas como el amor, el sexo, la hipocresía en el matrimonio, en la Iglesia y en la política sin ninguna clase de pudor. Sus novelas se desarrollaban en el ambiente aristócrata al que ella pertenecía y del que quiso desertar toda su vida, sin llegar nunca a conseguirlo. De ahí el título del filme como resumen de su fracaso, De la misma sangre."Como Strindberg, y aún peor, porque era mujer, fue considerada loca, genial, sucia e indecente, hasta el punto de que sus editores se negaron a publicar sus últimas obras. Toda su vida fue una outsider. No encajaba en la Suecia de su tiempo, y de ahí sus contínuas huídas al extranjero. Pero, además, era sensible, frágil, muy inteligente y había heredado la veta de locura que existía en su familia, y que ella interpre taba como un signo de degenera ción de su clase. Por si fuer poco, el médico que la trató cuando tenía 19 años la convirtió en una adicta a la morfina. Es increíble la fuerza de carácter que es necesaria para crear una obra en estas condiciones. Porque además, pasó momentos de miseria económica absoluta, como la época que estuvo en España"

Apoyar a su mujer

Agnes von KrusensJerna, esa mujer que Mai Zetterling define como una mezcla de Colette y Proust, será interpretada por Stina Ekbladh, la joven actriz finlandesa a quien Bergman considera la revelación del momento. Erland Josephson, el actor conocido en nuestro país por su intervención en los filmes de Bergman, interpretará al protagonista masculino, David Sprengel, marido de Agnes."Este personaje me interesa particularmente. Era un intelectual que comprendió que nunca llegaría a ser un gran escritor y decidió dedicar su vida a apoyar la carrera de su mujer. Era un gran cínico, pero la amó intensamente. Resulta curioso que tanto Virginia Woolf como Katherine Mansfield, Colette y ella misma estuvieran casadas con un mismo tipo de hombre. Eran maridos que las ayudaban, las criticaban, las corregían y llegaron a convertirse en sus agentes y editores. Sprengel mismo llegó a reescribir páginas enteras de su obra".

La obra y la vida de esta escritora sueca impresionaron vivamente a Mai Zetterling desde que la descubrió, cuando tenía 16 años, y ha sido muy importante para ella. Ya su primer largometraje, Los enamorados (1964), está basado en una de sus sagas, y causó una gran polémica en Suecia en el momento de su estreno, al ser calificada de indecente. Como su protagonista, Mai Zetterling parece no encajar en su país, ya que lleva muchos años viviendo en el extranjero.

"No es por una razón de impuestos, como todos creen. Ese no es mi problema. Sólo hago lo que me gusta, y eso implica muchas temporadas sin ganar dinero. Además, yo necesito un cielo azul. Pero lo cierto es que si viviera en Suecia me sentiría oprimída, porque creo que la sociedad sueca es más conformista ahora que en tiempos de Agnes. Mientras me limité a ser actriz, todo fueron aplausos, estaban orgullosos de mí, pero cuando empecé a realizar documentales en los que intentaba mostrar, entre otras cosas, el malestar nacido de la abundancia, se quedaron atónitos. El sueco no está acostumbrado a las críticas. Normalmente recibe adulación".