Lo absoluto, como referencia

La repetición de fórmulas verbales que implican idea de eternidad y de absoluto -tales como "fue siempre, es y será"- proliferan en el lenguaje oratorio de Constantin Chernienko, a juzgar por su última gran intervención pública antes de ascender a la secretaría general del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS) -discurso pronunciado ante el pleno del Comité Central en junio de 1983- y por el discurso ante el pleno del Comité Central encargado de buscar un sucesor a Yuri Andropov.El lenguaje retórico de Chernienko, en el que a veces se intercalan imágenes y metáforas, contrasta con el del fallecido Andropov, mucho más preciso y desprovisto de florilegios, según opinan los atentos lectores de las intervenciones públicas de ambos políticos soviéticos.

"La fuente más importante del poder del partido fue, es y será su contacto con las masas", se afirmaba en el texto de su primera intervención como primer secretario del PCUS. "El partido marcha firmemente por el camino que emprendió, el camino de la creatividad comunista y la paz. Así fue siempre en el pasado. Así será siempre".

Otro elemento que se repite en su discurso son las alusiones a la "formación de un hombre nuevo". Así, en su intervención como máximo dirigente del partido, Chernienko subrayó que "crear un nuevo mundo significa trabajar sin descanso por la formación de un nuevo hombre". Las referencias a la formación de un hombre nuevo están también en su intervención del pasado junio, cuando manifestó que "la construcción del hombre nuevo no es sólo el objetivo más importante, sino también una condición irrenunciable para la construcción comunista".

En este contexto' afirmaba que la sociedad soviética "ha entrado en la etapa de larga duración histórica del socialismo desarrollado" y recordaba a los sociólogos e investigadores que "los nuevos hechos pueden ser necesarios para precisar las impresiones adquiridas". "Sin embargo", concluía, "existen verdades que no están sometidas a ningún cambio".

Para Chernienko, el sistema de trabajo ideológico en el partido debe ser "como una orquesta bien tocada", donde "la armonía se consiga mediante una dirección competente".