Las puertas del ministerio
Cuando nos asombramos de que ocurran tragedias como la de Alcalá 20, es porque no miramos a nuestro alrededor. Realmente, tal como funcionan las cosas, podemos decir que somos el producto del milagro de cada día. De las cuatro puertas existentes en el Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo (MOPU), tres permanecen cerradas con llave desde las nueve de la mañana.De acuerdo con las características del MOPU, se diseñaron unos croquis para que en caso de emergencia se pudiera salir con fluidez de este laberinto, que no se llega a conocer a pesar del tiempo, dada su extensión y complejidad.
Los croquis constan de un plano marcando el lugar donde se encuentra uno en ese momento e indicando, de las cuatro salidas, la más cercana. Para ello se tiene que ir siguiendo la pista de unas pegatinas que se suceden a lo largo de los pasillos, galerías, escaleras, rellanos, etcétera. Siguiendo el color correspondiente de cada pegatina, se llega a la ansiada salida. Trabajadores y visitantes la encontrarán oportunamente cerrada.
La salida que da a Raimundo Fernández Villaverde, junto con la que desemboca en los jardines del MOPU, frente a la Castellana, y otra que desemboca en un patio exterior permanecen cerradas hasta las 14.45, hora próxima a la salida. La única que encontramos abierta es la que llamamos principal, por donde entran también las visitas (alrededor de 600 personas diariamente). Esta puerta queda reducida al 50% de su capacidad inicial (lo que también ocurre con las anteriores), al haberse instalado unos torniquetes de paso innecesarios, pues ya se dispone de tarjetas personales codificadas para el control de personal.
El número total de trabajadores y visitantes diarios en el MOPU oscilará entre las 4.000 personas. /
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