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Empeora el estado de salud del dirigente 'etarra' Miguel Goikoetxea, 'Txapela'

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El estado de salud de Miguel Goikoetxea Elorriaga, alias Txapela, miembro de la organización terrorista ETA Militar que el pasado miércoles fue objeto de un atentado en San Juan de Luz (Francia) -reivindicado por los autodenominados Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL)- continúa agravándose, según informaron ayer fuentes de su familia.

El portavoz del hospital Pellegrin de Burdeos, adonde fue trasladado después de sufrir el atentado, reiteró que en el centro sanitario no se va a facilitar ninguna información sobre la salud del herido, quien nada más ingresar fue considerado por los facultativos como "clínicamente muerto". No obstante, los médicos que le atienden se han fijado un plazo de 48 horas para decidir si procede o no intervenir quirúrgicamente. Las esperanzas de recuperación de Goikoetxea, que se encuentra en un estado de coma profundo desde que sufrió el atentado, son escasas, según los familiares.Por otra parte, la policía francesa se muestra escéptica respecto a que el Datsun encontrado en las cercanías de Bilbao pudiera haber sido el vehículo empleado por los agresores de Txapela, pese a que responde a la descripción realizada por la esposa de la víctima. La gendarmería del país vecino basa sus dudas en la consideración de que "es muy improbable" que el citado automóvil haya podido pasar la frontera gala, que fue cerrada a las 20.30 horas del mismo día del atentado, el pasado miércoles. También señalan las fuentes policiales francesas que el comando del GAL conocía las señas exactas del domicilio de la víctima, dirección ignorada por la policía francesa.

Enfrentamientos

El día de fin de año y durante toda la jornada de ayer las gestoras pro amnistía de Guipúzcoa convocaron manifestaciones de protesta por este atentado. La coordinadora KAS ha hecho asimismo un llamamiento a los trabajadores del municipio vizcaíno de Derio, donde residen los familiares de Txapela, para iniciar una huelga el próximo miércoles, día 4, al tiempo que invita a todos los trabajadores de la zona a emprender una jornada de lucha para ese mismo día. "El Gobierno central conoce perfectamente la trama existente, así como el Gobierno francés conoce la responsabilidad del consentidor Partido Socialista Obrero Español sobre esta política genocida", decía la nota de convocatoria de este colectivo.Hace dos días, una gran cantidad de octavillas apareció a primera hora de la mañana, sembrando las principales calles de San Sebastián con una única leyenda: "Ni GAL, ni ETA. Estatuto". Los panfletos no llevaban firma ni pie de imprenta. Las fuerzas de seguridad del Estado aumentaron la vigilancia en la capital guipuzcoana e intensificaron los controles en algunos puntos estratégicos del casco urbano.

A pesar de ello, por la noche se registraron enfrentamientos entre la Policía Nacional y grupos de personas que se manifestaron contra la guerra sucia. La manifestación, que se concentró en el Bulevar, recorrió algunas calles de San Sebastián y se dieron gritos contra la policía y en favor de ETA. Los manifestantes cruzaron dos autobuses y lanzaron piedras y petardos contra la policía, que los disolvió sin tener que emplear material antidisturbios.

Por otro lado, el pleno del Ayuntamiento de Irún ha aprobado una moción, presentada por la coalición nacionalista radical Herri Batasuna, en la que se protesta por "los últimos atentados registrados en el País Vasco francés contra refugiados vascos y por la guerra sucia". La moción fue aprobada por diez votos a favor -del Partido Nacionalista Vasco y Herri Batasuna- dos abstenciones -de Euskadido Ezquerra- y nueve votos en contra, correspondientes a los ediles del Partido Socialista de Euskadi-PSOE.

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