Llamamiento de Garaikoetxea en favor de la paz

El lendakari Carlos Garaikoetxea hizo ayer a los vascos un llamamiento reiterado a la pacificación de Euskadi en su mensaje de fin de año. La violencia, el paro y las recientes inundaciones fueron los principales problemas que citó el presidente del Gobierno autónomo, para insistir, acaso más que nunca, en la conveniencia de que en el País Vasco vaya imperando la convivencia pacífica.De las dificultades que han caracterizado a la comunidad autónoma en los cuatro años de legislatura, el fenómeno de la violencia figuraba de forma estelar en el mensaje de Carlos Garaikoetxea: "No queremos la paz de los cementerios, ni la del temor y la falta de libertad, ni la paz de la prepotencia de unos y la humillación de otros. La paz tiene que ser digna para todos los hombres y mujeres de buena voluntad. Y es posible si todos los que pensamos diferente en este país estamos dispuestos a aceptar que podemos estar equivocados en algo. Sé que siempre quedarán sectores irreductibles. Pero cada vez menos".

Tras expresar su solidaridad a quienes han sufrido el azote de la violencia o el desastre de las inundaciones, y a quienes carecen de trabajo, Carlos Garaikoetxea se congratulaba de la capacidad de superar dificultades que ha caracterizado histéricamente al pueblo vasco.

Sin embargo, insistió en la necesidad de erradicar la violencia. "La paz es el aliento que permitirá a este pueblo remontar sus dificultades y proporcionar a los vascos trabajo, concordia y bienestar".

Por su parte, el delegado del Gobierno en el País Vasco, Ramón Jáuregui, se dirigió a los ciudadanos realizando un balance del año en un tono más optimista: "Por primera vez en mucho tiempo España está gobernada con seriedad y con firmeza. Y, mientras tanto, en Euskadi sufrimos algunos problemas particulares de esta tierra que se convierten en retos colectivos para nuestro pueblo".