Ramiro Rivera califica de "estatalizadora" la ley de Sanidad

El presidente del Consejo General de los Colegios de Médicos, Ramiro Rivera, ha criticado duramente el texto del borrador de la ley general de Sanidad. "La ley general de Sanidad, tal como se presenta en el borrador (...) supone un paso atrás por lo menos de 40 años, porque va a promover la estatalización de los enfermos y de la gestión de la asistencia a esos enfermos", dijo Rivera. "Además, no va a dar al español libre elección de médico ni de centro hospitalario, la medicina será más cara y, probablemente, de peor calidad".Como aspectos positivos Rivera ha señalado la institución de la cartilla individual, la preocupación de la medicina preventiva comunitaria y la integración de todos los hospitales en una red funcional única. Añadió que, aunque no han recibido el texto del borrador, "la organización médica colegial ha colaborado con el Ministerio de Sanidad, ya que el pasado 17 de septiembre aportó a la Administración un estudio de cómo tiene que ser la reforma sanitaria".

Para la Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM), la ley puede caer, por precipitada, en la falta de consulta a importantes sectores de la población española. Considera importante que el Servicio Nacional de la Salud tenga un ámbito de universalidad, con la consiguiente extensión de la cobertura sanitaria a toda la población española, pero cree que la asistencia tenderá a ser un 20%. más burocratizada, masificada y deshumanizada, por carecer de dotación presupuestaria. La CESM opina que la medicina preventiva, con un 0,5% únicamente del presupuesto de los gastos generales del Insalud, escasamente podrá llevarse adelante.

Comisiones Obreras, por su parte, opina que el proyecto recoge un Servicio Nacional de Salud descafeinado y no especifica la financiación de esta ley, que es imprecisa en los plazos de aplicación. Sin embargo, valora positivamente la. participación de la población en los órganos de gestión.

Finalmente, la Federación de Sanidad de UGT considera que la ley supone un paso importante, al dejar atrás una reglamentación caduca que provenía de año 1944 y valora positivamente la creación del Servicio Nacional de Salud, que "supone la integración de toda la sanidad pública en una red única".