Enrique Barón insinuó que el accidente pudo deberse a un fallo humano

El ministro de Transportes, Enrique Barón, no quiso admitir expresamente la certeza de que haya sido un fallo humano del piloto del avión de Aviaco el causante de la tragedia ocurrida en la mañana de ayer en el aeropuerto de Barajas. Sin embargo, esta posibilidad fue reiteradamente sugerida de manera tácita por el ministro, quien se refirió a que el piloto no respetó los carteles en los que se prohibía la entrada a la pista de despegue, donde se produjo la colisión.

El ministro remitió la mayor parte de las preguntas acerca de las responsabilidades y causas últimas del choque a la comisión de accidentes que, presidida por el subdirector de Aviación Civil, Celestino Delgado, inició las investigaciones poco después de ocurrido el hecho. Barón indicó que tales investigaciones pueden demorarse en ocasiones hasta cuatro o cinco meses; por ello parece improbable la existencia inmediata de responsabilidades, máxime cuando el ministro evitó en numerosas ocasiones señalar culpables: "Es aventurado por mi parte establecer ahora hipótesis", respondió al ser interrogado sobre las condiciones físicas del comandante de la aeronave de Aviaco, presunta causa ininediata del accidente, a ojos de todos los observadores del accidente."No es mi papel decir si ha sido o no un fallo humano, sería una irresponsabilidad mía si yo aventurase las causas", indicó, tras señalar que aún desconocía lo que dicen los registros de voces contenidos en la caja negra.

La seguridad en Barajas

Tampoco se había entrevistado Barón a primera hora de la noche de ayer con el comandante ni la tripulación del avión de Iberia que colisionó con el de Aviaco: aunque hubiese hablado con las tripulaciones sólo podría tener una impresión; en todo accidente hay liersiones contradictorias, y hay que saber distinguir los papeles". El ministro desconocía si el avión de Aviaco llevaba o no retraso en relación con el horario de salida previsto.Enrique Barón, con semblante cansado y tenso, compareció ante los informadores, en la conferencia de prensa que habitualmente se ofrece tras los Consejos de Ministros, para admitir que el Gobierno "está seriamente preocupado" ante la imagen que, cara la opinión pública puedan dar accidentes como los ocurridos ayer y hace dos semanas con una aeronave de Avianca. "Barajas es un aeropuerto absolutamente seguro", repitió una y otra vez el ministro, quien declaró que, en un aeropuerto de estas características no son necesarios los radares de superficie.

De acuerdo con las declaraciones de Barón, una de las prioridades del Gobierno de Felipe González consiste en aumentar la seguridad de todos los transportes, para lo que se procederá a un aumento del 128% en las inversiones. "Pero dando solamente las cifras no se dice todo", y admitió que "una sociedad como la nuestra dernanda seguridad en todo tipo de transportes; la introducción de nuevos sistemias que implican más confort y velocidad suponen también un aurriento del riesgo, por lo que es decisivo que mejore el grado de conciencia en quienes manejan los equipos. No hay ningún sistema que pueda garantizar la seguridad al 100%; no se puede reemplazar al hombre como operador o control", agregó, dejando entender así la probable hipótesis de que un fallo humano fuese el causante de la tragedia de ayer.

El Gobierno decidió ayer, en Consejo de Ministros, celebrar hoy un funeral por el alma de las víctimas e instalar una capilla ardiente desde las 10 de esta mañana en Barajas.